PAT MARTINO visitaba Madrid dentro de una gira por la península, el lunes 11 de Noviembre en la Sala Clamores, de la mano de la Plataforma Cultura Inquieta.
Su nombre lo dice todo, Cultura Inquieta son un equipo de personas que intentan dar a conocer cualquier tipo de arte en toda su expresión, escultura, pintura, música…. sobre todo procurando huir de lo convencional, hasta ahora logran mantenerse activos y que el público siga sus propuestas.
Aunque el día escogido, un lunes, para el concierto no era el más idóneo la sala Clamores registró una más que aceptable entrada, y no es para menos porque ver al gran artista Pat Martino en directo es saborear la guinda del pastel más exquisito. Con una gran seriedad y lentitud Pat Martino se acomodó en su banqueta para comenzar una actuación de gran complejidad y concentración.
Composiciones largas innegablemente enfocadas al directo y despojadas de artificios dan pie a demostrar que Pat Martino no venía solo, Pat Bianchi al Hammond B3 y Carmen Intorre Jr a la batería avalaron de una forma incondicional la calidad del concierto dejando bien claro su talentosa forma de respaldar la figura de Martino.
La velocidad con la que sus dedos se mueven por el mástil dejaban atónitos a las primeras filas, que con el resto de la sala daban lugar a fuertes ovaciones al concluir los temas. La gran amplitud que puede llegar a englobar el jazz hace que el repertorio escogido abarcase desde los sonidos más enrevesados hasta la fusión con el rock, blues, música latina…
El virtuosismo se apoderó de los tres músicos y el resultado de tal fórmula fue un exitoso paso por Madrid, la complicidad entre los tres instrumentos estuvo presente durante toda la velada. Sin lugar a dudas nadie puede negar la condición de esfuerzo del Sr. Martino si nos atenemos a su trayectoria personal.
Una operación en la cabeza, a los 36 años, le hizo perder la memoria y cualquier habilidad. Bueno, pues a base de gran esfuerzo y empeño a costa de escuchar sus propios discos que no reconocía logró llegar a lo que vimos, seguir siendo uno de los más grandes guitarristas de jazz.