Dentro de la extensa oferta del Festival de Jazz (y mucho más) de San Javier, quizá el artista más importante de este año es el norteamericano (nacido en la universitaria ciudad alemana de Heidelberg por caprichos del destino militar de su padre) JACKSON BROWNE. Un tipo que, a sus casi 67 años, se encuentra (así lo comprobamos) en un momento dulce de su carrera. De ello dio sobradas muestras en el escenario del Parque Almansa de la ciudad murciana, encandilando a un numeroso público entregado desde los primeros acordes. Pero vayamos por partes…
Lo primero que te sorprende y te deja “tocado” para el resto del concierto es la calidad impresionante de sonido que lograron los técnicos que le acompañan. Puedes distinguir cada uno de los instrumentos con total claridad y la voz de JACKSON sonó limpia, con la reverberación justa y siempre en mezcla perfecta con el amplio instrumental que desplegó la banda. No es que los temas sean exigentes desde el punto de vista vocal, pero su voz se encuentra en un estado impecable, y no flaqueó en absoluto a lo largo del concierto.
Con bastante asistencia de público angloparlante, el recinto mostraba una buena entrada, y a Jackson se le veía a gusto, explicando curiosidades o anécdotas sobre la composición de lo que iba tocando de una manera bastante amplia, haciendo reflexiones sobre lo que le preocupa actualmente: la situación en su país, el estado del océano, las consecuencias del terremoto de Haití y su granito de arena en forma de música… Y todo ello de manera distendida y sin resultar en absoluto cargante.
Como guitarrista que aspira a no más que “rascar” el instrumento, me resultó sorprendente el constante cambio de guitarras y bajos, al punto de que, en cada canción, al amigo BROWNE le entregaban una guitarra distinta. Sólo le vi repetir un par de veces. Hasta las acústicas eran diferentes en cada tema. Un “pipa” se dedicaba exclusivamente a tenerle las guitarras preparadas para una u otra clavija (eléctrica o acústica) y perfectamente afinadas, ecualizadas y pasadas por el filtro sónico correspondiente para que “el jefe” no tuviera más que enchufarlas y sacarles un sonido cristalino. El desfile incluyó cualquier marca y modelo que podáis imaginar; hasta una “resonator guitar” que sonó como los ángeles.
Otro punto a destacar es la enorme calidad de los músicos que le acompañaban. Con el propio Jackson Browne a la voz, piano y guitarras, estaban Shane Fontayne (guitarras), delicado y preciso donde los haya; Greg Leisz (guitarras, pedal steel, lap steel), que protagonizó momentos sublimes, sobre todo a la “pedal”; Jeff Young (Hammond, piano y coros), dotando de ambiente los temas y perfecto como corista; Bob Glaub (bajo), hierático pero efectivo; Mauricio Lewak (batería), una máquina del ritmo a las baquetas o a las escobillas; y Alethea Mills (coros), bella voz que se compenetró perfectamente con el teclista y con Jackson para crear atmósferas mágicas.
El resultado, no me canso de decirlo, fue un sonido de película, con momentos de éxtasis que nos transportaron a los años 70, pero con limpidez, claridad, transparencia… Un sonido terso, sin renunciar a la frescura. Un torbellino sónico desplegado a lo largo de dos horas y media largas que nos dejó algo hambrientos, al no sonar el esperado “Stay” tras el último bis.
En cuanto a los temas, al setlist me remito, destacando para mí “Runnnig on Empty” y la necesaria “Take it Easy”, uno de los tres temas que compusiera nuestro artista en colaboración con los fabulosos EAGLES para su primer plástico. Incluso el público se animó a solicitarle alguna que otra canción, renunciando Browne en un principio: “vamos a ceñirnos al papelito”; pero aceptando hacer “Sky Blue and Black”, que no figuraba en el papel, antes de la aclamada “Doctor, my Eyes”.
En resumen: uno de los grandes conciertos a lo que este juntaletras ha asistido este año, con el mejor sonido y un hacer instrumental y vocal insuperable. Cercano a los 70 años, aún quedan JACKSON BROWNE y “Americana – Country Rock” para rato.
Setlist de Jackson Browne en el festival Jazz San Javier el 6 de julio de 2015:
1. Barricades of Heaven
2. Just Say Yeah
3. Long Way Around
4. Leaving Winslow
5. These Days
6. For Everyman
7. I’m Alive
8. You Know the Night
9. For a Dancer
10. Fountain of Sorrow
11. Bright Baby Blues
12. Which Side Are You On?
13. If I Could Be Anywhere
14. Standing in the Breach
15. Looking East
16. Birds of Saint Marks
17. I’ll do Anything
18. Sky Blue and Black, a petición del público.
19. Doctor My Eyes
20. The Pretender
21. Running on Empty
Bises
22. Take it Easy
23. Our Lady of the Well
Texto Manuel Martínez Ferrándiz. Fotos de Emilio Pastor.
Emilio Pastor en flickr.
