The Hooten Hallers pisaban por primera vez nuestros escenarios presentando lo que es su último trabajo «Chillicothe Fireball», pasaron por la madrileña sala Boite Live el pasado 23 de junio y a los pocos asistentes que acudimos a ver a este trío proveniente de Missouri nos dieron una auténtica bofetada del country-punk-blues más sucio y sudoroso que puedas escuchar. Un aporte compositivo en el que conjugan todos los elementos decisivos para alejarse de los patrones que encasillen al grupo en un estilo determinado. The Hooten Hallers sacudieron toda su energía compuesta por un repertorio encuadrado en sus dos trabajos con una actitud gamberra, desenvuelta…. dispuestos a poner en evidencia su música y llegar a un público que desde los inicios quedaron perplejos con esta formación.
Aquí no hay trampa ni cartón, un guitarrista que aumenta sus posibilidades sentado con el pedal steel o de pie con la guitarra y forzando una voz rota de esas que duele al escucharla, un batería en gayumbos empapado en sudor aporrea las cajas y el bombo y una saxofonista que mantiene un talante determinante en el sonido The Hooten Hallers. De esta manera se forja el amasijo musical que The Hooten Hallers mostraron al público madrileño. Un sonido a veces estridente, algo elevado en su conjunto, donde la guitarra revela todo la fogosidad que desprende esta formación. The Hooten Hallers es de esas formaciones que descubres por un casual y te enganchan sobre todo si los presencias en directo, ahí es donde realmente muestran todo su poderío.
