Diamond Dogs regresaban a la sala El Sol de Madrid el pasado 8 de Septiembre presentando su último trabajo «Quitters and Complainers» dedicado al tristemente fallecido compañero de fatigas Magic Gunnarsson. Diferentes pelajes se volvieron a unir gracias al rock and roll en un concierto para los más fieles seguidores de la banda liderada por Sören «Sulo» Karlsson y amantes de los acordes rockeros que vienen practicando desde sus inicios Diamond Dogs. Rock con unas influencias totalmente evidentes pero que han sabido sacarle el máximo partido y darle su toque personal en los más de veinte años que llevan de andadura.
La puesta en escena de la presentación de los nuevos temas no fue de lo más aclamada por un público que se mantuvo, buena parte del concierto, en una actitud fría, al igual que el comportamiento de la formación encima del escenario y eso que se pegaron una buena sudada. Posiblemente la nostalgia por el compañero desparecido hizo mella en los sentimientos de sus compañeros, hubo rock and roll sí, pero en esta ocasión algo descafeinado, faltó esa chispa que tan bien saben encender y mantener viva la llama del rock and roll durante todo el concierto. Diamond Dogs hicieron un recorrido en más de una veintena de canciones repasando sus grandes éxitos entrelazados con los temas que dan forma y vida a su nuevo álbum registrando un buen sonido durante toda la noche. No estuvimos ante un «Sulo» inquieto y contagioso de energía, como en otros conciertos. Aún así entre los asistentes hubo opiniones de lo más dispares, los más devotos al sonido Diamond Dogs no recordarán esta velada como una de las mejores, aunque para gustos los colores.
