Joe Satriani presentaba su decimoquinto álbum «Shockwave Supernova» con la llegada de octubre en Madrid. En esta ocasión disfrutamos de su espectáculo en el Teatro Circo Price y aunque no tuvimos teloneros por problemas logísticos, la espera no hizo más que aumentar los nervios de los fans del actual dios de las seis cuerdas. Sobre las nueve y media de la noche y con el Price casi con aforo completo, empezó un espectáculo de imágenes acompañado por un cuadro instrumental. Con ello aparecieron los componentes de la banda, que al igual que el año pasado en el concierto que ofreció en el MadGarden, estuvo compuesto por Mike Keneally a guitarra y teclado, Bryan Beller al bajo y Marco Minnenar a la batería.
Empezó el espectáculo con «Shockwave Supernova» presentación de su último disco, donde Satriani nos abrió la boca son su técnica para no cerrarla hasta el final de la noche. Su segundo tema, «Flying in a blue Dream» dio un retroceso en el tiempo y se inclinó por recordar aquel grandioso disco editado en 1989 nominado a los Premios Grammy. Su tercera canción de la noche, «Ice 9» tuvimos la primera toma de contacto más cercano del sublime Keneally y Joe nos deleitó pellizcando las cuerdas con sus dientes al más estilo Hendrix.
A mitad de la noche, entre «Crazy Joe» y «All of My Life», el guitarrista nos dejó disfrutar de su banda donde nos sorprendió nuevamente Mike Keneally interpretando él solo un dueto entre guitarra y teclado para dejar a continuación, después de una gran ovación bien merecida, un solo de batería donde el público intercambió con Marco vítores y platillos. Después de este momentazo del concierto se fueron sucediendo canciones de sus primeros discos con los nuevos temas fijando una buena mezcla en lo que fue el ritmo del concierto.
Todo ello acompañado por imágenes y juego de luces muy acordes durante las más de dos horas que duró el concierto. Cerró el telón con «Satch Boogie» donde las imágenes nos llevaron a las ilustraciones de aquel disco de 1987. Se hizo de rogar tanto antes de los bises que parte del público les pilló en las escaleras el empiece de «Big Bad Moo » donde por fín escuchamos a Satriani también a las voces y a la armónica. El público ya en pie dió todo en la última canción «Surfing with the Alien «. Un empiece de octubre mágico en el madrileño Circo Price donde, por lo menos por mi parte, no eché en falta cantante alguno pudiendo disfrutar de la melodía de las guitarras del neoyorquino y los coros de teclado, bajo y batería. En una de las últimas imágenes proyectadas, aparecía Satriani con sus inseparables gafas en las que se leía COLOSAL. Colosal sigue siendo este gran artista que cerca de los 60 años sigue imparable y esperamos que por muchos años mas.
Texto: Pilar Liuti Salinero
Fotos: Gema Esteban Fernández