Tokyo Sex Destruction, en una minigira promovida por Conexión Canarias, visitó las dos islas capitalinas de Canarias los pasados días 2 y 3 de octubre, recalando el primero de ellos en la sala Mojo Club de Las Palmas de Gran Canaria. No era la primera vez que visitaban Canarias, tal y como recordó Raúl J. Sinclair. Ya estuvieron en Gran Canaria en el 2010, en la desaparecida Sala Paraninfo.
Tokyo Sex Destruction, banda catalana de rock alternativo, a cuyo frente está Raúl J. Sinclair (único superviviente del proyecto original) con una formación totalmente renovada, destiló en el Mojo Club sus lejanas esencias punk, rock, garaje y sus más actuales pop, soul y funk. Con reminiscencias Stooges, MC5, T(I)NC, o Hives, se «reinventaron renaciendo de sus cenizas» (afirmación del productor de su último disco) en su último trabajo de estudio «Sagittarius» (B-Core – 2013) con Fernando Pardo (Sex Museum-Coronas) al frente de la producción en los estudios analógicos de la vieja escuela, Black Pepper Studio, en Girona
Banda que pensamos que no ha sido adecuadamente valorada dentro de nuestras fronteras y que ha pateado traseros por casi todo el viejo continente, e incluso al otro lado del Atlántico, descargando su rabia varias veces en el SXSW de Austin-Texas. Nos presentaron y dieron cuenta de ese quinto trabajo de estudio, cambiando el rumbo que seguían con su anterior «The Neighbourhood» (B-Core – 2009)» pero sin perder su identidad ni ápice de adicción. Una evolución evidente desde su primera joya y manifiesto revolucionario «Le Red Soul Communitté» (B-Core – 2002).
En un apático y bochornoso viernes por estas latitudes, y con otro bolo reseñable desde Gran Bretaña en la ciudad y fiesta bávara de octubre en el casco histórico, el concierto se trasladó por problemas «administrativos» del Paper Club, donde inicialmente esta programado, al Mojo Club, donde definitivamente la banda de Raúl J.Sinclair nos ofreció un bolo espídico y vibrante, como acostumbran. Un par de temas, como dijo Raúl, de su época mas punk, pidiendo mas volumen a la voz… escaso en ese momento y hasta el final, para proseguir con el «In the Right Place» uno de los temas del disco con percusiones, vientos y coros, genial en el disco y muy veraz con Tokyo Sex Destruction al desnudo, y es que es ahí donde radica su fuerza.
Uno de los respiros, por llamarlo de alguna manera, vino con «When Those Times Are Coming Back (It Could Be Painful For Your Head)» otro corte del ultimo trabajo y en el que se centró su concierto, que fue in-crescendo, con un Raúl danzando cual samurai poseído con deje Brown o Jagger, aporreando su teclado y contorsionándose como si fuera de goma. Subieron el ritmo con «Dead Cops«, garajera de club con efluvios psicodelicos, los cuales no abandonaron en «Gimme Something to Believe In«. La hora escasa de bolo, que se nos quedo corta, estuvo repleta de intensidad, cruda energía y la actitud de estos cuatro monstruos de las tablas. Concierto muy interesante y mas que reseñable de lo que aterriza por estos lares. Lástima la poca afluencia de público que de manera cíclica se queja de la poca programación en la isla de bandas foráneas y cuando vienen no acude a disfrutar de proyectos tan interesantes como el que ocupa estas líneas.
Vídeos: Tony Ventura y Jabier Rioboó
Fotos: Esteban Campos y Tony Ventura
Galería fotográfica del concierto de Tokyo Sex Destruction en el Mojo Club el 2 de octubre de 2015:
Escucha «Sagittarius» (B-Core – 2013) de Tokyo Sex Destruction:
Escucha «The Neighbourhood» (B-Core – 2009) de Tokyo Sex Destruction:
