Villalar de los Comuneros un año más rindió homenaje a los que dieron su vida por Castilla en la considerada una de las grandes revoluciones liberales europeas. El 23 de Abril de 1520 en estas mismas tierras Los Comuneros castellanos vieron como perdían una de las más justas batallas. La rebelión del pueblo castellano sucumbieron ante las tropas imperiales del autoproclamado rey Carlos I que vieron como decapitaban a sus líderes Padilla, Maldonado y Juan Bravo en este mismo lugar. De esta forma las libertades de Castilla se vieron truncadas con la imposición de un rey que apenas sabía hablar el castellano y un buen número de nobles y clérigos flamencos entraría a formar la nueva corte.
Mucho ha cambiado desde la primera celebración hace cuarenta años donde testigos que lo vivieron atestiguan que había más Guardia Civil que asistentes y eso que no eran pocos. Aunque el espíritu reivindicativo se palpa nada más entrar en la campa de Villalar hoy nada es como antaño y no es porque podamos presumir de vivir tiempos halagüeños. La festividad del 23 de Abril se celebró con total normalidad, con un ambiente inmejorable, música, bailes tradicionales, comida, bebida y una especial acogida tanto por la gente de Villalar como por los amigos de la localidad zamorana de Toro. Así da gusto!!! Cuanta buena gente anda suelta por ahí. Un día aconsejable para pasar el día con amigos, familia y conocer nueva gente. En Villalar se dieron cita gente venida de los más recónditos lugares de nuestra geografía y es que esta celebración es digna de hacerla honor.
Las actuaciones musicales en la campa principal vinieron de la mano de Alalumbre, Los Hermanos Cubero, Querido Watson, La M.O.D.A. y los simpáticos y divertidos Triquel. La diversión y el buen rollo resplandeció ante las inclemencias meteorológicas que amenazaban lluvia, hasta el tiempo se unió a esta festividad y nos respetó… y es como dice el cantar del Nuevo Mester de Juglaría «…. comunes el sol y el viento, común ha de ser la tierra, que vuelva común al pueblo, lo que del pueblo saliera». Un estupendo día en la mejor compañía con ganas de volver a repetir y tener siempre presente lo que es y fue parte de nuestra historia, «El que olvida sus raíces pierde su identidad»!!!
