Imelda May regresa con nuevo disco Life Love Flesh Blood, quinto álbum de la irlandesa que publica el 7 de abril tras «Tribal» (2016) y en que cantante junto al productor T-Bone Burnett toma una nueva dirección en su carrera, tras su ruptura matrimonial con su ex Darrell Higham, casados desde 2002 hasta el año pasado, presentando nueva imagen, y un sonido más cercano al soul y completamente alejado del rockabilly con el que se ha dado a conocer.
Life Love Flesh Blood se grabó en los Angeles durante siete días, contando con las colaboraciones en el estudio de grabación de Jeff Beck, Jools Holland, Marc Ribot, Jay Bellrose y Zach Dawes, misma banda de acompañamiento que acompañó a Robert Plant y Alison Krauss en Raising Sand, los tres últimos músicos.
Golpe de timón de Imelda May con este nuevo disco que en su día apareció como un huracán por la autopista del rockabilly para pasar después al rock’n’roll volcánico con trazos de Swing, Jazz y Blues, jugando a disfrazarse de Patsy Cline. La cantante y multiinstrumentista irlandesa, comenzó su carrera musical a la edad de 16 tocando con varias bandas locales y músicos, antes de formar su propia agrupación en 2002. Lanzó su álbum debut, No Turning Back, en 2003 y se trasladó a Londres después de su lanzamiento.
