Ina Forsman reinterpreta el blues en la Sala Clamores y nos presenta su disco debut y homónimo editado por Ruf Records. Acompañada por batería, piano y bajo, inunda con una voz potente que arranca de su corazón, diez canciones compuestas por esta finlandesa e interpretadas con un desgarro que emociona al público, que respiran blues en cada nota, también una versión de Nina Simone “Want a Little sugar in my Bowl”, ¡magnífica!
No predomina la guitarra, sino un sonido que unido a la sensualidad en sus movimientos, un toque de modernidad y cierto exotismo, hacen de esta frontwoman una intérprete a seguir.
“Para mí, una gran cantante es aquella que tiene el poder en su voz y no le da miedo usarlo, en todos sus colores y matices.”
Lleva desde los 17 años tutelada por el harmonicista finlandés Helge Tallqvist que la introduce en el blues. Busca inspiración en sus referentes, Donny Hathaway, Aretha Franklin y Sam Cooke.
“Es muy importante sonar original. No hay otra forma de escribir mis temas. Tengo una historia y nadie la puede explicar como yo”
Con planes de giras internacionales, Ina Forsman quiere vivir el momento y dejarse llevar por la música. “Mi próximo disco podría ser totalmente diferente y seguramente lo será. Es lo que convierte la composición en excitante, porque no sabes nunca de dónde te vendrá la próxima inspiración”.
Texto por Ana Hortelano.
Fotos por Ana Hortelano y Nela Ortiz.
