Es tiempo de recuperar nuestras sensaciones tras disfrutar del gran Mikel el pasado Octubre en la sala complutense del The Green Irish Pub. Con el otoño al borde de la extinción, ya, contamos la horas para el siguiente show del donostiarra por estos lares. La cita será el proximo 28 de diciembre en la Joy Eslava. Un concierto en fechas navideñas que seguro será un regalo con más de una sorpresa sobre el escenario.
Erentxun está más que nunca de enhorabuena, por un lado por su espectacular gira de este año que incluye entre sus fechas americanas, la mítica actuación en Los Ángeles en The Roxy Theatre, su futura parada en México y la nominación a Grammy latino de su su último trabajo. Ese «El Hombre Sin Sombra» que está haciendo las delicias de nuestras listas anuales colocando en nuestros favoritos, al menos, cuatro temas. A todo esto tenemos que sumarle la re-edición con motivo del Record Store Day en forma de Black Friday de la mítica loncha de Duncan Dhu, «Por Tierras Escocesas».
Mikel está afectado por la muerte de gran mago, el gurú, el chamán de la música Americana, el ABSOLUTO Tom Petty. El ídolo que tanto ha influenciado al trovador vasco. No en vano Petty le ha tocado con su varita y le ha nombrado abanderado de todo un género, del que es embajador por tierras españolas. El próximo 25 de Enero tendrá lugar en la madrileña Sala BUT el concierto homenaje al de Florida en el que, como no podía ser de otro modo, Mikel estará presente.
La música de Erentxun destila una mezcla perfecta a perfección de los ochenta y folk moderno americano en cada acorde. En esta gira Mikel tira de acústica con maestría y «desnuda» su arte ante un público que, fiel, valora la carencia de artefactos y el enfrentamiento del músico en los escenarios agarrado a su madera Gibson de seis cuerdas y a su portentosa armónica. El concierto de Alcalá fue una mezcla perfecta entre temas de su nuevo álbum, clásicos de toda su carrera y toques de sus comienzos con Duncan Dhu.
Como el propio Mikel comentaba, ha llovido mucho desde la publicación de su primer disco en solitario, aquel «Naufragios» abanderado por «A Un Minito de Ti» y mucho más desde sus primeras composiciones con Duncan Dhu, «Canciones» suponía la reconversión de su EP, el mencionado paseo por tierras escocesas en un larga duración que incluía sus estandartes «Cien Gaviotas», «Jardín de Rosas» y «Esos Ojos Negros». En aquellos tiempos parecían canciones orientadas a la adolescencia femenina, pero miradas hoy bajo la lupa de la experiencia, se nos antojan pequeñas maravillas del folk lejos del alcance de cualquier otra banda española. Son todo un cimiento de algo que está ahí y que debemos apreciar en su medida para entender nuestra cultura musical y las raíces que los de Donosti pusieron con su punto de mira en el gran Johnny Cash entre otros.
Volviendo al show de la ciudad complutense, además del genial set, las ganas y el empeño en alargar de modo maravilloso la noche, nos quedamos con la versionaza del tema de Miguel Bosé, «Nena». Dónde la MONUMENTAL Marina Iñesta, acompañante de lujo esta noche de Mikel, demuestra todo su poder en una voz potente y angelical a partes iguales. Marina es una joven promesa cántabra, asentada en la capital, que se está convirtiendo en realidad a pasos agigantados, en solitario y con su banda, Repion. Marina ayuda a Mikel en algunos de sus shows a «cubrir» el puesto de lo grabado por Maika Makovski en «El Hombre Sin Sombra». Genial elección de Erentxun para templar sus temas en la justa medida de una voz femenina que eleva el trabajo de Mikel a arte.
En esta redacción tenemos bastante claro que en lo que a música de raíces americanas se refiere, en este país, hay dos claros exponentes que han indo creciendo con el paso del tiempo, macerándose hasta conseguir ofrecer lo mejor de sí mismos sobre las tablas de los teatros y escenarios, en los estudios de grabación, en el cariño de su obra, en la calidad con la que la entregan. Creo que los que me leis tenéis claro que el otro artista que acompaña a Mikel en este viaje es el incomparable Coque Malla. Coque y Mikel, Mikel y Coque. Los dos solos han traído a este país la calidad de aquellas composiciones ultramarinas. Seguro que el tío Tom y el abuelo Neil se sentirían orgullosos de ellos. A rebufo vienen otros jóvenes, pero sin Mikel y Coque la senda estaría demasiado virgen y arriesgada como para explorarla. Lo hacen de un modo muy sutil, porque siguen agarrados por otro lado a la tradición de los 80. Pero si leis entre líneas descubriréis un universo maravilloso. El universo de la calidad musical que tanto nos hace falta en este país. Nos vemos en Diciembre, Mikel. Salud!
