Fito & Fitipaldis pasó en su «Gira 20 Aniversario» por Las Palmas de Gran Canaria este pasado sábado 7 de abril. Abrieron la fiesta Said Muti y Muchachito en el Anexo al Estadio de Gran Canaria que mostró un lleno.
Fito & Fitipaldis regresaban por Canarias, eso para mí siempre es una buena noticia y procuro no faltar a la cita con Fito. Desde su pateo con Platero en aquel botxo de los 90´, hasta estos 20 años con sus Fitipaldis, siempre todos fenomenales músicos, desde aquel 19 de agosto de 2004 donde demostró ser profeta en su tierra. Detractores de su continuismo que siguen yendo a ver a los australianos más famosos o bandas clásicas británicas. Pero así funciona este país, siempre habrá una banda intergeneracional y Fito lo ha conseguido, tres generaciones unidas entorno a unas letras que se saben de carrerrilla. Desde el hilo musical del dentista, al chiringuito o la radio estas letras adquirieron carácter de doctrina de honestidad, y la gente las hizo suyas no entendiendo de edades ni clases.
Tarde fresca en 7 Palmas, concentración de gorras en los aledaños del Anexo que dejaba entrever un montaje que prometía un espectáculo soberbio. Pienso, que de lo mejorcito a nivel nacional en gira. Entramos en hora, mirando al cielo de reojo pues el anexo es descubierto, Said Muti y su guitarra Juanma Barroso se acomodaban para defender media docena de temas de su disco «De Tripas Rock ‘N’ Roll» y otros tres de sus anteriores trabajos, lo hicieron ante una nutrida explanada y defendieron el pabellón de manera fabulosa como banda local, un puntazo el abrir a otro grande.
Muchachito el de Santa Coloma como en sus inicios de hombre orquesta aporreó bombo, platos y arengó al publico sin parar hasta llevárselo al lego. Fué el punto de inflexión perfecto para lo que se avecinaba y la peña disfrutó de su propuesta rumbera, rockabilly, funky o como lo quieras llamar, Jairo Perera tiene el culo pelao también. «Siempre que quiera» como no, arrasó entre un recinto petado ya. Fito en los primeros temas salió con su pequeña en brazos protegida con cascos para bailotear en el foso, a ritmo de bombo y guitarra.
Caricatura de Fito calaverizado en las nítidas pantallas conduciendo hacia un cementerio donde encuentra a sus compañeros…. y zas…. arranca el show. «Siempre estoy soñando» con su rasgueo solitario enfervoriza el recinto, la mecha está encendida, así lo corrobora «Un buen castigo» uno de esos temas redondos, «Por la boca vive el pez» y «Me equivocaría otra vez» donde ya el bolo iba sobre ruedas con el sonido perfecto. Javier Alzola (saxo, coros y percusiones) no ha cambiado un ápice (quizás las canas) desde aquel «txamizo» en Galdakao donde ensayaba con su banda de jazz, Alejandro Climent (bajo y coros), Carlos Raya (guitarra, coros) nos mostró un catalogo de preciosas hachas que maneja a la perfección, y es que tiene sangre azul, junto a Dani Griffin (batería) forman una banda compacta y sin fisuras en directo. Dieron un repaso a toda la discografía exceptuando «Los Sueños Locos», tocaron «Todo a cien» de La Cabra Mecanica, y Muchachito subió de nuevo al escenario para acompañar a Fito en «No soy Bo Diddley» y su tema «Me tienes frito». Una agradable sorpresa fue «Entre dos mares» de Platero y Tú, el recinto era una olla a presión que no dejó de bullir en ningún momento llegando a explotar con los dos bises «Rojitas las orejas», «Soldadito Marinero» y «Entre la espada y la pared» y «Acabo de llegar» después de más de dos horas. Sonrisas de oreja a oreja y sudor, y es que Fito & Fitipaldis son rock intergeneracional, padres, hijos y nietos se fueron satisfechos y así ocurrirá en el resto de las 20 ciudades y 25 fechas de esta gira. 20 años y los que quedan…esperamos el bocata de queso «le supo» a Fito como se dice por estos lares.
Texto Jabier Rioboó. Fotos Esteban Campos.
Fito & Fitipaldis@Las Palmas 7 abril 2018 Anexo Estadio Gran Canaria Fotos Esteban Campos Trujillo.
Said Muti@Las Palmas 7 abril 2018 Anexo Estadio Gran Canaria Fotos Esteban Campos Trujillo.
Muchachito Bombo Infierno@Las Palmas 7 abril 2018 Anexo Estadio Gran Canaria Fotos Esteban Campos Trujillo.
