La excepción. Sí. De verdad. Th’ Booty Hunters siguen su camino al margen de modas, tendencias y discursos huecos. Su próxima misión: presentar en la Sala Apolo de Barcelona, donde actúan los grandes, su nuevo álbum «Speaking Of The Devil» (Stash Records, 2018). En resumidas cuentas este trabajo es otra demostración de ritmo, fuerza y buenas canciones en la que han colaborado artistas de la talla de Myram Swanson y David Soler.
Pero a esta banda del Baix Llobregat, comarca colindante con la capital catalana, no le tiembla el pulso. Y es que son familia, pues cuatro de sus miembros son hermanos aunque de diferentes dinastías: por un lado Javi y Dani Bañón se ocupan del bajo y la guitarra respectivamente. A ellos se añaden los Ollé, con Jordi a la batería y Xavi haciendo sonar las seis cuerdas, el banjo cuando se tercia y, por supuesto, su voz. Completando el cuarteto está Marc Santo, el hombre del fiddle, el violín endiablado de los músicos del Salvaje Oeste.
De hecho, su estilo puede traernos algún eco de Ennio Morricone y sus célebres bandas sonoras, pero nos quedaríamos cortos limitándonos sólo a ese detalle. Su discurso se puede denominar -como ellos mismos confiesan-, «garrulo grass», y si queremos traducir este sorprendente vocablo sería una mezcla de Country, Punk y Rock con garra, valentía y sin complejos. Aunque se rían de su propia sombra, no cabe llamarse a engaño porque poseen verdadero talento. Alejados del muro de las lamentaciones en el que lloran muchos nostálgicos de tiempos pasados, ellos miran hacia delante a su manera. Como Sinatra, Camarón de la Isla o Johnny Cash, leyendas que no pedían permiso para ser osados y creativos.
Escucha el nuevo disco de Th’ Booty Hunters «Speaking Of The Devil» (2018).
Fotos por Desi Estévez.