Hank III sentencio de él ««Bob Wayne es el Kris Kristofferson de nuestra generación». Continuando con la tradición de leyendas del «outlaw country» como Johhny Cash, Waylon Jennings y Hank Williams Sr. y Jr. anda presentando su nuevo trabajo «Bad Hombre» (2018) por la Península, aunque en realidad este hombre siempre anda presentando algo, porque, día más día menos, debe de girar 365 días al año.
Las músicas de raíz norteamericanas son la base de su música, el country y el folk, todo ello pasado por el tamiz de su actitud punk, son su esencia. Bob Wayne vive dentro de la mejor tradición vaquera, su música es sencilla, básica, sin grandes alardes y sin exceso instrumental, ella rezuma country con actitud y letras despellejadas, contando historias de juergas, tabernas y excesos, en muchos casos con él mismo como protagonista, aunque hace tiempo, según dicen, que abandonara la senda salvaje que amenazaba con llevárselo al otro barrio.
Visitante habitual por estas tierras, a medida que pasa el tiempo cede ese salvajismo inicial de sus primeras visitas a una madurez, pero manteniendo la socarronería. En esta ocasión viene con Outlaw Carnies nuevos, carne nueva, de refresco; donde destaca su guitarrista, de toque fino y digitaciones vertiginosas. Chaleco de cuero, sombrero vaquero….y hasta una colaboración multitudinaria en spanglish con selfie del tema «Fuck the Law».
Puede que algunos necesiten grandes espectáculos o mega nombres para sentir la música, pero un puñado de fieles, siguen peregrinando los domingos o, como en este caso, un miércoles, cualquiera sin importancia, a unos pequeños pueblos de Tierra de Pinares, que gracias a conciertos como este, hacen que se conviertan en días importantes e inolvidables.
Texto y fotos por Jesús Díez.
