Andaba una operada Leti paseándose por la ciudad junto al mar de políticos de todos los palos que la hacían las palmas con esto de la Seminci que parece ser que ninguno (por lo menos que yo viera), se dejo caer por la Plaza de la Universidad, aunque también puede que algo tuviera que ver el frio que se anunciaba para el fin de semana….La Federación Vecinal de Valladolid organizo un concierto en este caso en su segunda edición «por la igualdad y contra la violencia machista», donde pudimos disfrutar de dos bandas, cuyos miembros, merecen mucho más respeto que toda esa gente VIP que a buen seguro no paso frio en las cálidas salas del Auditorio Miguel Delibes dándose un baño de ego y autoestima más que notables….y de paso haciendo algún «bisnes» y dándose bastante pompa.
Ley Mostaza fue la encargada de abrir la noche con su música entre tradicional, divertida, reivindicativa y en ocasiones de difícil clasificación. Ellas son Laura e Inés, y, al margen de que quedo claro que coleccionan sombreros, cuentan que su música «es una caricia a un cactus, un grito desde la entrepierna, una bofetada entre risas. El dúo formado por Inés y Laura es una amalgama de estilos, sonoridades, ritmos y hasta idiomas. Siempre con su toque personal, versionan conocidos temas de carácter reivindicativo y también presentan sus propias creaciones con su característico humor como denominador común, conformando un espectáculo que hará las delicias de las personas más desquiciadas. Son dos, son entrañables, pero hacen mucho ruido»… y esto último lo pudimos comprobar en una actuación divertida y muy reivindicativa.
En alguna cordillera del mundo existe una montaña que llaman libertad, y las cuatro Hell’s Breasts se presentaron en la Plaza de la Universidad de Valladolid dentro del «II Concierto por la igualdad y contra la violencia machista«, el pasado día 26 de Octubre de 2018 dispuestas a escalarla; eso si bien equipadas para la ocasión, con sus ropas de nieve, guantes y gorros respectivos, no sea que en su cumbre sople bien el viento frío de esa supuesta libertad, (porque, todo sea dicho en su falda a eso de las 10 de la noche la temperatura ya era más bien fresquita).
Estas cuatro chicas, Alba Esteban Martínez y Elsa Sánchez Fuentes, a las guitarras; Ana Tejero, batería y Merche Méndez al bajo; son la demostración real de lo que es una banda de Rock´and´Roll, si yo tuviera o tuviese una banda me gustaría ser como ellas, son divertidas, comprometidas, se lo pasan bien sobre el escenario (y seguro que en las largas horas de ensayo), y nosotros disfrutamos un montón con ellas; y encima hasta tiene una pequeña legión de fans franceses….no se las puede poner muchas pegas, asi que, porque no, vamos a decirlo una vez más: son la mejor banda que tiene esta ciudad, porque la música es un compendio de muchas cosas, pero sobre todo de actitud y de esto ultimo tienen para dar y regalar.
Texto y fotos por Jesús Díez.