Jordi Ricol sigue adelante en un viaje creativo que parece no tener final al frente de su alter ego Ree Kohl. En otro tramo de la gira de presentación de “Lost Train” (Rockdising, 2018), su último trabajo hasta la fecha, ya prepara el que será su próximo disco. Pero en plena tormenta creativa tiene tiempo para sentarse a charlar para contarnos las novedades de esta gira, sus proyectos futuros y el porqué de dos recitales dedicados a Pink Floyd no exentos de creatividad y polémica. .
Estás en plena gira de tu último disco, “Lost Train” y he visto que compaginas diferentes formatos: con banda, el teclista Jordi Castells junto a ti y, finalmente, tú solo. ¿A qué se debe esta variedad?
Adaptarse a las circunstancias de cada momento. En realidad ya no tengo una banda en el sentido estricto de la palabra. El pasado mes de junio se nos pudo ver con algunos de los músicos que llevé en la gira de “III” entre 2014 y 2015 tocando en la sala Boca Nord de Barcelona, pero no existe una continuidad, pues sus miembros están teniendo mucho éxito con sus respectivas bandas, con lo cual no disponen prácticamente de tiempo libre para otros proyectos. Por esa razón no descarto formar en el futuro otro grupo de acompañamiento con nuevos músicos. Respecto a las otras dos cuestiones, he estado con el teclista Jordi Castells haciendo algunos shows acústicos con bastante buena acogida y que han servido para que un nuevo público haya apreciado las canciones de “Lost Train” en un formato distinto al del disco. De hecho, estaremos los dos tocando en la sala Stone de Tarragona el próximo 24 de noviembre (evento en facebook: https://www.facebook.com/events/496394237431944/). También estoy organizando una gira de cinco o seis shows por Italia de cara al próximo verano, en la que iré yo sólo con mi acústica presentando mis canciones en el país alpino.
Con “III” (Rockdising, 2013) y “Cold War Remake” (Rockdising, 2014) habías conseguido un sonido muy americano, en la línea del Hard Rock de los ochenta, tremendamente optimista y para todos los públicos. Ahora da la impresión de que has regresado a unas atmosferas mucho más intimistas.
No del todo. Es cierto que en este último trabajo existen algunas canciones más intimistas que en sus predecesores, como “Getting Old” o el mismo tema que da título al disco, pero otras canciones mantienen esa línea de Rock duro y melódico; sería el caso de “Looking for a Woman”, “Be Strong” o “Outsider”, que suenan más enérgicos.
Te lo digo, por que el video clip que pudimos ver del tema “Getting Old” era realmente melancólico.
Totalmente de acuerdo con lo que afirmas. Creo que es una de mis mejores canciones. La compuse cuando cumplí cuarenta años, ¡es la puta depresión de los cuarenta! Por primera vez en mi vida, dejé de sentirme joven y esa tristeza la canalicé en esta canción. Además, el vídeo es muy artístico: una vela que se apaga, un cigarro que se consume, un reloj en el que las horas pasan a toda velocidad…. Creo que tiene un dramatismo digno de Roger Waters en “The Wall” (1979) y con un solo de guitarra final a cargo de Eric Baule, del grupo Moonlop, sencillamente espectacular.
Ahora has editado un nuevo vídeo clip con el tema título “Lost Train” que también tiene un francamente aire triste.
Efectivamente. Aparezco yendo en dirección a ningún lugar y buscando un tren que ya no volverá. Me inspiré para componerla viendo como algunos músicos iban logrando sus objetivos mientras que otros, entre los que me incluyo, nos hemos quedado a las puertas del triunfo. Ahí tuve la amarga sensación de que mi tren ya había pasado, aunque lógicamente me alegré por los que lo habían logrado. Para este nuevo vídeo, colaboran también grandes músicos como Carlos Cervero, Oscar G. Rivas, Jordi Castells y José Luis González, que son grandes personas con las que ya trabajé hace muchos años y ha sido una buena oportunidad para reencontrarnos. Los dos vídeo clips que comentas han sido rodados, dirigidos y producidos por Julio Caminero (jcpro.es) que es un excelente profesional; os recomiendo que investiguéis sus trabajos, porque valen realmente la pena.
Pese a haber afirmado que la época de Syd Barretina formaba parte del pasado, recientemente has vuelto a dedicar un par de recitales al legado de Pink Floyd, ¿incongruencia u oportunidades que debías aprovechar?
Me juré y perjuré que no volvería a subir a un escenario con el nombre de Syd Barretina y no lo he hecho, aunque sí que es verdad que junto a Castells hemos realizado un par de recitales tocando la música de Pink Floyd. ¿El motivo? A veces no es tan sencillo desligarnos de nuestro pasado y todavía hay mucha gente que me recuerda por ello. La insistencia de los promotores que me llamaron para organizar dos noches dedicadas a Pink Floyd y el dinero que nos daban por ello han sido los dos motivos. Aunque como te digo, no fueron presentadas como un tributo a nada, simplemente como “Ree Kohl Plays Pink Floyd” de la misma manera que Dream Theater han interpretado “Master of Pupets” de Metallica o el mismo “The Dark Side of the Moon” en ocasiones especiales y tampoco son una banda tributo. Son artistas consolidados que en un momento concreto tocan material ajeno. Te aseguro que nunca más me verás tocar en una banda tributo al uso. No tengo nada en contra, que cada uno haga lo que quiera con su vida y su carrera, pero yo sólo puedo ser Ree Kohl, desde que me levanto hasta que me acuesto.
Sé que tu próximo trabajo de estudio es un regreso al pasado, a piezas que habían quedado abandonadas en el cajón desde los años noventa.
Son temas que compuse entre 1995 y el año 2000. En su momento se grabaron de forma muy precaria con el aparato Fostex de cuatro pistas y ahora les estoy dando una nueva forma con la tecnología actual y la profesionalidad que da la madurez y la experiencia. Para este disco abandono el Hard Rock y me adentro en terrenos más cercanos a la canción de autor anglosajona o de Pop Rock de años noventa. No sabría decirte a qué suena, pero en esa época escuchaba los recopilatorios azul y rojo de los Beatles sin parar, Simon & Garfunkel, Jeff Buckley, REM, Pink Floyd, los “Unplugged” de Nirvana y de Alice In Chains a todas horas, Fiona Apple, Pj Harvey, etc… Por ahí van los tiros. Estoy realmente ilusionado con este proyecto, pues como ya hice en su momento con mi álbum de Subconscious “The End of the Suffer or The Beginning Of Pain” (Rockdising, 2013) ha sido un placer regresar a canciones que había compuesto de adolescente y recuperar toda aquella frescura.
Puedes conocer más sobre este artista en los siguientes enlaces:
https://www.facebook.com/reekohl
https://www.youtube.com/reekohl
Texto por Federico Navarro y fotos por Ramón Hortoneda.