25 años es lo que cumple el Valladolindie, el autodenominado (y con razón) «El Festival Más Largo del Mundo». Un proyecto que nació en la mente de Roberto Terne, cronista de la actualidad cultural de la ciudad, músico, programador e integrante de bandas como Los Sustitutos, una de esas formaciones a las que en cualquier momento tendremos que realizar un merecido reconocimiento y recuperación; o los psicodélicos Dehra Dun, banda que por momento se asemeja a los ojos del Guadiana.
En estos 25 años, y muy en especial en la última época, convive una programación, llamémosla «alimenticia» de esas que te permiten hacer caja y aguantar el paso del tiempo, y por donde han pasado formaciones como Vetusta Morla, Love of Lesbian o la banda del momento, y una de las fuertes apuestas de estos 25 años, los madrileños Izal.
Pero, paralelamente, mantiene una programación de esas que dan renombre y enorgullecen a cualquier iniciativa….una programación infinitamente más interesante por donde han desfilado nombres como La Casa Azul, Los Flechazos, Los Hermanos Dalton, los manchegos Mucho, los catalanes Brighton 64 o sus hermanos Matamala, sin olvidarnos a los renacidos Vancouvers, combo madrileño que anuncia un reencuentro que puede ser muy gratificante, entre otras muchas formaciones; bandas que, gracias a este festival, han tenido un hueco sobre los escenarios de esta ciudad, sobre todo en unas épocas pasadas donde las dificultades, tanto de medios como de espacios eran grandes, en especial lo primero.
Esta celebración se inicia con los asturianos Ilegales, banda que acaba de editar su nuevo trabajo, «Rebelión»(2018), y que vive, casi 40 años después, una especie de segunda o tercera juventud. Siguen manteniendo la actitud y las formas y dejando bien claro lo que tiene que ser una banda de Rock and Roll; es cierto que los años pueden que les hayan aplacado algo, un amigo, me comentaba que la última vez que les vio se montó un buen pifostio con la policía y la gente…lo cierto es que cuando tienes 25 años haces cosas que con 50 las piensas dos veces, y es más que probable que la acción de «trincarte» una botella de Jack Daniels la reemplaces por una o dos de cualquier refresco energético, pero la esencia y el alma lo siguen manteniendo a pesar del paso del tiempo.
El concierto nos presentó esos temas de su último trabajo mezclados con esos temas iniciales que a estas alturas, muchos de ellos se han convertido en himnos de una generación…..dos horas casi de un tirón, y es que ya lo comentó Jorge Ilegal, él no es de mucho hablar y su público tampoco, así que el Rock and Roll sonó sin parar e hizo disfrutar a un público multigeneracional que llenaba la Sala Blanca del Lava de Valladolid.
Las recientes «Mi amigo Omar», «Si no Luchas te Matas», «No Tanta, Tonto» o «Suicida», sonaron junto a clásicos como «Dextroanfetamina», «Soy un Macarra», «¡Hola Mamoncete!», «Enamorados de Varsovia», «Agotados de Esperar el Fin», «Destruye» o «Problema Sexual».
Los Ilegales siguen muy vivos, andan presentando su nuevo trabajo en una infinidad de salas donde el cartel de «No hay entradas» es una de las tónicas de esta presentaciones; demostrando que las bandas veteranas siguen estando muy en el candeleo, siguen conservando el tirón y la pervivencia de muchas de sus letras….si acaso. viendo como esta el percal ese «Tiempos Nuevos, Tiempos Salvajes», lo tendrán que reemplazar por un «Tiempos Viejuno, Tiempos Salvajes», que es a lo que parece que nos encaminamos.
Texto y fotos por Jesús Díez.
