30 minutos le bastaron al mozalbete, Kurt Baker, de la pequeña ciudad de Portland, en el estado de Maine (EE.UU), para dar la vuelta a un teatro con todo lo que de seriedad y de formalismo encierra y dejar bien claro las leyes básicas que rigen eso que se llama Power-Pop, con la actitud inequívoca del punk setentero americano que no da tregua ni un segundo, y siempre bien secundado por sus inseparables compañeros de aventuras, Juancho López al bajo, uno de los padrinos de la música en la ciudad de León, esa bestia parda importada desde la Rusia de Putín que responde al nombre de Sam Malakiam a la batería y en esta ocasión reemplazando al ausente Jorge Colldan a la guitarra, Manolo Cauchola a la guitarra, que ya con anterioridad había tocado con Paul y Juancho entre el 2008 y el 2012.
«Let’s Go Wild!» (2018), es su último trabajo que anda presentando desde ya hace un buen puñado de meses por multitud de escenarios tanto de este convulso estado como del viejo continente, un disco que resume y es un compendio de lo que es este genero, canciones enérgicas, aceleradas e intensas, diversión y rock&roll, donde se plasman las múltiples influencias que la banda ha adquirido, esa banda que es un pilar fundamental de su música en estos momentos, porque si el norteamericano se ha destacado como un gran interprete es en buena parte porque se sabe rodear de una banda que va como un cohete.
Otro nombre con gran crédito, Little Steven, se fijó en él ya hace un tiempo, editando en su sello sus últimos trabajos…y si uno de los pequeños mafiosos más añorados de la pequeña pantalla se fija en algo, no seremos nosotros los que pongamos alguna objeción.
Concierto denso con un gran sonido que con su brevedad nos quedo con ganas de mucho más, pero seguro que es cierto, ese dicho de que las cosas buenas, se hacen de desear.
Escucha «Let’s go wild!» (2018) de Kurt Baker Combo:
Texto y fotos por Jesús Díez.