Ante todo tenemos que dejar bien claro que esta banda originaria de Nashville, Tennessee; si del mismo lugar que el whisky, tiene más horas de vuelo que las que podemos imaginar a primera vista, y eso lo podemos constatar desde el primer momento que se suben al escenario.
La ecuación de este problema es muy sencilla, si sumamos un algo bastante de rock´and´roll, con posos o influencia de gente o bandas como ACDC, The Rolling Stones, Aerosmith, James Brown, John Lee Hooker….a lo que se añade una pizca de glam y algo de psicodelia y todo ello elevado a la enésima potencia con esas poses tan propias de cualquier banda que se aprecie y adore el rock, pero así, a lo natural, sin que se noten forzadas, (de ahí eso de las horas de vuelo), algo de descaro y mucha empatía con la gente, al final lo que nos va a quedar es el show; el resultado es The Tip, y punto.
La banda surge en 2014 y desde entonces han publicado diferentes trabajos » The Tip» (2015), y «Sailor’s Grave» (2017) y han girado por Estados Unidos y ahora se embarcan en una aventura por el continente europeo, que les ha llevado a visitar Alemania, Francia, La República Checa, Eslovenia, Holanda, Italia junto a nuestro país y, con suerte, también les acercara a Japón y Sudamérica, y esa irreductible aldea de Tierra de Pinares no podía ser ajena a una banda como la norteamericana, y sus Conciertos Salvajes es un buen lugar para ello.
Benny Carl, voz, guitarra y armónica junto a Myles Baker, guitarra; Robby Bote, bajo y Dixie Carl a la batería son sus integrantes. Todos, sin excepción se gustan y disfrutan sobre el escenario….pantalones acampanados, arrogancia, camisas desabrochadas para acabar sin ellas; y un ejercicio de poses y piruetas son la base de ese show, bueno eso y la música, que tampoco es para despreciar, pero acostumbrado en los últimos tiempos a bandas muy eficientes y notables pero que se limitan a tocar y punto, es de agradecer un ejercicio de vuelta a lo que puede ser la esencia de una banda de rock´and´roll, descaro, desenfreno, algún exceso y saber llevarse a la gente a su terreno, y de esto último ( y de lo otro) muchas de las formaciones nacionales o locales tendrían que tomar algo de ejemplo.
The Tip puede que no inventen nada, pero derrochan ganas y energía, son un chute de adrenalina y nos recuerdan con su actitud a esas bandas que, a estas alturas, se dejan ver poco, donde la actitud hardrockera y el descaro eran su seña de identidad y, por descontado, en estas fechas tan de recogimiento y meditación, son un buen bálsamo para poder sobrevivir a ellas. Al final ya lo dicen en una de sus canciones y te puedo asegurar que no te van a engañar: «What you see is what you get, No we ain’t fakin’ it!»/ «Lo que ves es lo que obtienes, ¡No, no lo estamos fingiendo!».
Texto y fotos por Jesús Díez.