The Flamin Groovies (y añado «entre comillas») volvieron a Valencia este pasado domingo 16 de junio en el marco de su gira española para tocar al completo «Teenage Head».
La formación de San Francisco, California, Estados Unidos, nacida en los 60 y que pasaron de un primitivo rock and roll, y de anticiparse a sonidos posteriores como punk rock por ejemplo a hacer powerpop y pop de influencia beat en su periplo británico, vinieron sin Roy Loney, tras sufrir un accidente justo al embarcarse en esta gira europea.
1971 fue un año clave para la banda, ya que Roy Loney, líder fundador del grupo con Jordan, abandona la formación tras gabar aquel disco siendo sustituido por Chris Wilson. Desde este momento, Cyril y Chris tomaron los mandos y se abandonaron al power pop más exclusivo, melódico y guitarrero a la vez. Se convirtieron en una banda diferente a la de su primera época, menos rockeros, y quizá más sofisticados, sin perder un gramo de calidad por el camino.
Esa obra maestra publicada en 1971 y que plantaría cara ese mismo año a los mismísimos The Rolling Stones con su “Stickly Fingers”, considerado uno de los mejores discos de los años 70.
El grupo con Cyril Jordan a la guitarra y voz, sin llegar a Loney ni de coña, y repartido con un más competente Chris Von Sneidern en tareas vocales y guitarra, comenzaron su actuación en el Loco Club con ese clásico powerpop Shake Some Action para seguir con una versión del I’ll feel whole lot better de los Byrds (sin comentarios, me costó hasta reconocerlo) y Jumpin In The Night o Too late for your lies para seguir con los temas de Teenage Head, tercer álbum de la banda de 1971 y que Roy Loney se suponía que iba a cantar con ellos íntegro.
Finalmente del disco tocaron Whiskey Woman, High Flyin Baby, Have you seen my baby?, Yesterday’s Numbers cantada por Tony Sales a la batería, con el momento álgido de la noche interpretando Teenage Head cantada por Chris Von Sneidern ( menos mal que no lo cantó Cyril) , más el bis con uno de sus grandes temas Slow Death.
En mi opinión, una banda más joven con Chris Von Sneidern a la guitarra y voz, Tony Sales a la batería y Atom Ellis al bajo que suplía las carencias de Cyril Jordan, mejor que en el anterior concierto del Loco Club del 2016 con la banda de siempre… siendo un concierto demasiado corto, crítica generalizada tras el concierto aquella noche amén de las pocas dotes de Jordan como cantante, que al menos eso si no se perdía como Chris Wilson hace 2 años, pero tenía que haberlo cantado todo Chris Von Sneidern, no obstante Cyril Jordan sigue siendo buen guitarrista como siempre. En fin los años pasan y no en balde.
Texto por Alex Ruiz y fotos por Carolina T.
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