Weyes Blood llega en noviembre a España para presentar «Titanic Rising»

Weyes Blood llega en noviembre a España (Madrid y Benidorm) por segunda vez para presentar su obra más ambiciosa, Titanic Rising, uno de los discos más aclamados en este 2019 por toda la crítica. La californiana completa con este disco su evolución, que le ha llevado desde sus comienzos experimentales hasta canciones más redondas y maduras, sin perder su personalidad en ningún momento. Un camino que ha conseguido llevarla a ser uno de los nombres en boca de todo el mundo, desde las revistas de tendencias a nostálgicos del sonido californiano de los 70s, que Natalie Mering (la cantante que se esconde bajo el nombre de la banda) ha sabido traer al siglo XXI con elegancia y sin que suene a agua pasada.

La familia de Mering fue nómada, cambiando de ciudad en varias ocasiones durante su infancia. Nacida en Santa Mónica, su padre, Sumner Mering, era conocido en la escena angelina de new wave, además de frecuentar músicos como Joni Mitchell. Al final, se establecieron en Pennsylvania. Además, siendo pequeña, la familia se introdujo en una comunidad pentecostal, lo cual hizo que creciera en un ambiente profundamente religiosa. A los 12 años, fue una serie televisiva la que le abrió los ojos y le mostró que el dogmatismo de su comunidad no era bueno. ¿Su personaje favorito, gay, tenía cerradas las puertas del cielo solo por ser distinto?

Muy jovencita, con apenas 15 años, Mering comenzó a usar el apodo Wise Blood para escribir canciones, nombre que tomó de la novela de Flannery O’Connor del mismo nombre. Después de terminar la escuela secundaria, Mering se mudó a Portland para especializarse en música. Sin embargo, dejó los estudios en su primer año, empezando a actuar en la escena underground, primero como bajista en la banda Jackie-O Motherfucker y, más tarde, en Baltimore, con Nautical Almanac.

En 2011 lanzó el muy underground The Outside Room (firmado como Weyes Blood And The Dark Juices), que pasó bastante desapercibido. En octubre de 2014, aparece el mucho más maduro The Innocents. Un gran paso adelante en términos de composición y atmósfera, que nos trae a la mente nombres como Laura Nyro o Tim Buckley. Un disco que crece con las escuchas, con su construcción minuciosa llena de ruidismo amable y una tristeza omnipresente pero en cierto modo acogedora. Grabado en su apartamento y terminado en New York, adonde se muda, es una primera muestra de su incipiente talento. Aunque estará poco tiempo en la gran manzana: tras el relativo fracaso comercial del disco vuelve a Los Ángeles, donde se establecerá definitivamente.

En 2016 aparece su tercer álbum Front Row Seat to Earth, en Mexican Summer, prestigioso sello que comparte con gente como Kurt Vile o The Tallest Man of the World. Natalie continúa refinando su sonido psicodélico de folk-pop, poniendo menos énfasis en la experimentación (lo cual se agradece) y destacando su impresionante voz y unas letras introspectivas y poéticas. Y el cambio a sonidos más amables le funciona. Aclamado por la crítica, el disco le coloca por fin en nombre de todo el mundo, realizando una extensa gira por Estados Unidos y América y acabando en las listas de lo mejor del año en numerosas publicaciones.

Y llegamos a 2019 y su Titanic Rising, donde todo encaja a la perfección. El espíritu de radio FM de los años 70 continúa, pero se expande con una composición de canciones más atrevida y unos arreglos majestuosos. Alguien ha definido la producción de Jonathan Rado (miembro de Foxygen) como un trabajo de Joni Mitchell producido por Brian Eno. Es bastante acertado. Todo fluye con naturalidad (sintetizadores, canciones folk, pop de cámara,…) y Natalie suena libre y confiada, controlando la intensidad emocional con maestría. Dejando atrás los temas de amor tradicional, en este disco hay más de una declaración apasionada a la belleza de nuestro planeta que, como el Titanic, se hunde mientras la orquesta (nosotros, los humanos) sigue tocando. Por eso cierra el álbum la canción que, según la leyenda, sonaba en el famoso transatlántico cuando éste se hundió.

«El hundimiento del Titanic es una tragedia icónica de la humanidad. Me fascinó cuando era niña, y luego hicieron la película al respecto y me encantó. Trata sobre la falta de dominio del hombre sobre la naturaleza, la arrogancia del ser humano, … Me parecía un título estupendo en el contexto de estas canciones.»

Si bien todos los álbumes de Weyes Blood tienen algo especial, posiblemente sea éste por el que será recordada para siempre. Las  fechas de la gira española de presentación de Titanic Rising son las siguientes:

Jueves 7 de Noviembre. Madrid. Sala 0. American Autumm (Son Estrella Galicia)

Viernes 8 de noviembre. Benidorm. Primavera Sound Weekender.

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