En el vigésimo aniversario de Hackensaw Boys, el sexteto presenta un nuevo lote de canciones originales en el EP «A Fireproof House of Sunshine», publicado el pasado junio.
Tras publicar el año pasado el excepcional «The Old Sound of Music Sessions», una grabación guardada en un cajón desde 2009 que reflejaba todo ese espíritu, Hackensaw Boys siempre explosivos y bucólicos , rindiendo pleitesía al padres del género Bluegrass Bill Monroe, Earl Scruggs o Ralph Stanley. Pokey Lafarge fue en el pasado miembro de los Hackensaw Boys.
Su núcleo duro compuesto por David Sickmen a la guitarra, Caleb Powers al violín, banjo y mandolina, Beau Dodson a la percusión y Chris Stevens al bajo, son músicos de Virginia que beben de esas jug bands rurales de principios del siglo pasado, especialmente dinamitando el Bluegrass de los años 20, teñido de Folk, Country y Rock and Roll.
A los The Hackensaw Boys en su país se les reconoce también como la “The Dirty Band” o “The Ramones of Bluegrass” (Los Ramones del Bluegrass). Además de participar en los mejores festivales en Estados Unidos tanto de música de raíces como de otros géneros, estuvieron de gira con la leyenda Charlie Louvin en el 2003.
The Hackensaw Boys, junto a Old Crow Medicine Show, Trampled By Turtles, The Devil Makes Three y The Avett Brothers están en ese top genuino de bandas que coquetean con ese catálogo de canciones llenas de instrumentos con el banjo, sierras, armónicas, cucharas, mandolinas, violines o instrumentos de percusión inventados por los propios “Chicos de las sierras de metales” como es el Charismo, al que le dedican un merecido homenaje. Instrumento de percusión compuesto por multitud de cucharas y sierras musicales.
The Hackensaw Boys saben que tienen muchísimos admiradores, por el hecho de no traspasar esa línea de lo tradicional que separa lo rural de lo más moderno o popular, además sus conciertos son un auténtico espectáculo de entretenimiento y música a muy alta velocidad.
