Cuando el ruidismo no está reñido con la metafísica de raíces, aparecen cosas maravillosas como Garrett T. Capps & NASA Country durante un muy buen concierto en el Rocksound en Barcelona el pasado 21 de septiembre en el ciclo RootSound Fest. Abrieron el concierto del tejano, Claes Anderson Band.
Contraventor durante aquella noche hacia un género tan consuetudinario como es el country y sus derivados, presentó su viva tex mex, honky tonk fronterizo y space rock. Ecos de Dylan y sinuosa psicodelia bien entendida. Recuerdos para Dough Sahm, Flaco Jiménez o Sir Douglas Quintet, ¡viva!
Garrett T. Capps parece saber lo que está haciendo. Y la quintaesencia de eso, fue un impulso de autenticidad. Capps todavía le queda conquistar el mundo, pero lo hará a la antigua usanza, perfeccionando su talento en algo que el público respetará y disfrutará a través de un trabajo duro.
Su música durante toda la noche, estuvo cortado de una tela tradicional, pero adornado con algunas sorpresas. Su música, country espacial durante toda la noche, con lo electrónico omnipresente e integrado en su directo perfectamente, acompañado de trompeta, bajo, batería, su guitarra acústica y sintetizador con texturas inesperadas, oscuridad, sensualidad, ruido, ritmo y polirritmo atmosférico nos voló la cabeza a todos.
El de San Antone fue familiar, irreverente y original en todo. Calibró perfectamente su concierto en el que nos condujo a través de su más de una docena de canciones, repartidas en sus cuatro discos, el reciente «All Right, All Night» y «Sounds of San Antone» con los The Three Timers, «In The Shadows (Again)» (2018) y «Y Los Lonely Hipsters» (2016), por un trance.
A veces asfixiante y en ocasiones liberador. Provocador y bromista en ocasiones a lo Kinky Friedman y Lee Hazlewood, ofreció casi dos horas de country propulsivo y épico. Un lo-fi que deambuló por todo el salón del Rocksound en una bruma de opiáceos.
La orgía final del concierto fue para enmarcar. Muy pocas veces, yo, he sentido aquello. «Here right now», «Brand new dance», «Born in San Antone», y el bis con «She’s about a mover» de Sir Douglas quintet, hizo explotar la ruleta en sí misma, inolvidable.
Como un espejismo desde el oeste de Texas, ese efecto surrealista y épico cierre, Garrett T Capps se retiraba a las sombras y nosotros nos quedamos con esa sensación de ver uno de los mejores conciertos del año. ¡Viva Garrett!
Screw you we’re from Texas!
Texto por Carlos Pérez Báez. Fotos por Desi Estévez.
