A pesar de no haber lanzado nuevo álbum en casi tres décadas, The Psychedelic Furs han estado girando durante la mayor parte del nuevo milenio. Siempre con Richard y Tim Butler como miembros constantes durante la extensa carrera de la banda, llegaron este pasado 19 de octubre a la Sala Salamandra de Barcelona con una de sus formaciones más fuertes hasta la fecha.
Nada más y nada menos que David J (más conocido por ser miembro fundador de Bauhaus, y bajista de Love and Rockets) fue el encargado de abrir la noche, siendo esta una de sus dos únicas apariciones en nuestro país, ambas compartiendo escenario con The Psychedelic Furs.
Venía presentando su nuevo trabajo ‘Missive to an Angel from the Halls of Infamy and Allure’, uno de sus proyectos más personales grabado mayoritariamente en Praga, y que él mismo denomina obra culmen de su carrera en solitario.
El músico salió a escena acompañado de Fiona Brice (Placebo, Simply Red) al violín, y Robert Vasicek, que ha contribuido en su nuevo trabajo, al teclado.
David J deleitó al público barcelonés con una selección de temas que se remonta a sus inicios en solitario “Crocodile Tears and the Velvet Cosh«, hasta algunos más actuales como “The day David Bowie died” (que, como él mismo explicó, compuso tras enterarse de la muerte de David Bowie) o “Blue eyes in the Green Room”, todo ello perfectamente adornado con perfectas líneas de violín, que también incluyó en algunos de los temas de sus anteriores bandas. David vino a recordarnos que es uno de esos artistas con una trayectoria impecable.
Y llegó el momento, The Psychedelic Furs hicieron su entrada triunfal, Richard, Tim y el resto de la banda; dos de sus miembros, Paul Garisto a la batería y Mars Williams al saxo, formaron parte de la banda en la década de los 80, y Roger Morris a la guitarra rítmica, fue miembro fundador de la banda junto a los hermanos Butler. Junto a ellos, Amanda Kramer está a los teclados (desde principios de los 2000), y Rich Good (el miembro de la banda más joven) a la guitarra solista.
La frenética línea de “Dumb Waiters” fue la encargada de abrir el concierto, y, entre la adoración del público, se abrió paso la excelente voz rota de Richard Butler, que, como impasible al paso del tiempo, sigue conservando ese aura de rockstar y el magnetismo que siempre lo han definido.
Tras semejante apertura de concierto, la banda siguió con “Mr Jones”, a destacar el papel de Mars Williams al saxo, haciéndose con el protagonismo en el escenario en varios momentos de la noche, en temas como “Love My Way”, “Pretty in Pink” o la fantástica “Sister Europe”, con la que el público acabó de entregarse completamente.
Como novedad, la banda nos presentó su nuevo tema “The Boy Who Invented Rock and Roll”, que se dice que formará parte de un nuevo álbum de la banda tras décadas de espera. Con un sonido más sólido que en algunos de sus tan famosos éxitos, y una más que destacable línea de guitarra inicial por parte de Rich Good, pero sin perder para nada su marca original.
Y tras “Heartbreak Beat”, y las líneas rítmicas imparables de Paul Garisto y Tim Butler, la banda dejó el escenario.
Sin hacerse de rogar, volvieron a aparecer para interpretar el que sería el último tema de la noche, “India”, que dejó, definitivamente, al público rendido a sus pies.
Con rumores de un nuevo álbum de estudio el año que viene, y la grandiosa actuación que ofrecieron en Barcelona, no cabe duda de que los Furs siguen, no sólo en completa forma, sino igual de impasibles al paso del tiempo que hace tres décadas.
Texto por Belén Mena y fotos por Desi Estévez
