Kacy & Clayton. Dulces perlas canadienses.

Podemos calificar de Delicatessen el paso del dúo canadiense Kacy & Clayton por la madrileña sala Café Berlín. Una sala que nos está dando muchas alegrías, primero por el formato y acústica de la misma y segundo por los bolos que se vienen programando allí. En esta ocasión, The Mad Note Co. nos trajo otra de esas joyas que acumula en su cartera de artistas rock, country y folk. Un portfolio que es tan variado como acertado y que pone el listón muy alto en cuanto a la calidad de bandas que visitan nuestras tierras. El esfuerzo se nota y se agradece. Ya llevamos unos años disfrutando de joyas conocidas que por fin nos visitan y descubriendo maravillas que nos hacen la vida más dulce y apetecible.

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Volviendo a la pareja de primos folk, nos quedamos literalmente sin palabras tema tras tema. La voz de Kacy es inalcanzable al 90% de los mortales. Una variedad de tonos y registros que tornan cada canción en auténtica delicia. Se movieron entre el folk y el country con alguna que otra visita al pop moderno y lo bordaron absolutamente todo. El complemento de Clayton es increible, tanto en la voz, como a la Telecaster. Ambos entran en el momento oportuno en cada tema. La Gibson acústica de ella sirve de balsa perfecta para las caricias de su voz y los arreglos electricos de Clayton, junto con la compañia de sus tonalidades cantando, conforman un producto preciosista. Una artesanal obra de orfebrería folk que te deja en el cuerpo esa confortable sensación apacible del que no desearía estar en ningún otro lugar.

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Podríamos tratar de describir su obra únicamente comparando con otras delicias que el lector ya conoce. De ese modo cogeríamos lo mejor de los Carpenters, metiéndolo en una cocktelera con un toque de Mastersons, aderezando a la banda de Steve Earle con un poquito de Matthew Sweet y Susanna Hoffs. Y para completarlo podemos poner en el cocktail una guinda en forma de maestría con aromas a Dolly Parton y melodías Beatles. Si alguien cree que esto no es una manjar, que deje de leer esta crónica ahora mismo y se ponga a ver Tele5.

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Venían a presentarnos su preciosa última loncha, «Carrying On», que es, sin lugar a dudas, una de las mejores obras del pasado 2019. Del mismo dieron buena cuenta, alternando con temas de sus anteriores obras y un par de versiones para los clásicos «White Butte Country» de Great Speckled Bird y «Razorback Woman» de John Stewart. Cuatro albums y un EP les contemplan ya. Un setlist bonito y equilibrado que sonó a gloria en el Berlín donde elevaron cada tema exponencialmente sobre el sonido de estudio. Como las buenas bandas, ganan con el directo. Algo que nos llama la atención es cómo terminan las canciones. No hay un corte brusco de platillos o pegada sobre la guitarra. El tema progresa y progresa hasta que muere en el aire de la sala, como quedándose flotando en el infinito para siempre. Parece una reivindicación de que las canciones no empiezan y acaban. Como dijo el sabio, los poemas y las canciones, simplemente están. Y los artistas son aquellos que consiguen descubrirlas. Kacy & Clayton son unos ecologístas musicales y quieren devolver a la naturaleza su arte. Eso es lo que nos trasmiten con el modo de dejar ir cada una de sus interpretaciones en la nada que nos rodea. Preciosos.

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Una vez más estos canadienses nos dan pie a reivindicar el arte que nos viene de aquellas tierras con inistencia. Se los camufla de estadounidenses a la mayoría, pero el canadiense está hecho de otra pasta. Es un tipo más completo, más culto, más europeo, más sensible. Cada perla que nos viene del norte de ese precioso continente es mejor que la anterior. Es una gozada, una garantía de que si vas a ver folk hecho en la tierra de la hoja roja, lo vas a gozar.  La lista es infinita, por ejemplo, Leonard Cohen, Neil Young, Joni Mitchell, el super grupo progresivo Rush y, por supuestísimo, la banda por antonomasia, THE BAND. Sólo esos cinco ya son los pilares de la música americana moderna con los que podríamos conformar un tejido suficientemente consistente para estar disfrutando y hablando durante horas de influencias musicales que han marcado época. Aunque la lista no se queda ahí, ya más lejos del folk y la tradición, encontramos nombres de indudable calidad como: Alanis Morissette, Celine Dion, Michael Bublé, Bryan Adams, Arcade Fire, Sarah McLachlan, K.D. Lang, Paul Anka, Nelly Furtado, Avril Lavigne. Junto a todo estos nombre, el ejemplo más reciente, además de Kacy & Clayton es la gran Whitney Rose. Qué más podemos decir de Canadá, pues que nos invitan constantemente a repetir lo que decía el genio de Woody Guthrie: «This Land Is Your Land»

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Dicho todo esto, supongo que los que no los visteis ayer en Madrid o el día anterior en Barcelona, lo haréis en Donosti (22 de febrero – Altxerri Bar) o Santander (23 de febrero – Little Bobby), donde cierran esta mini gira por España. Nos visitan con frecuencia, así que lo que estamos deseando es que destilen su siguiente creación y vengan pronto a deleitarnos sobre las tablas. Y si pueden ser las del Café Berlín en Madrid, pues casi mejor. Salud!

Fotos y vídeos: Ana Hortelano y Javier Naranjo

Texto: Ana Hortelano, Decio Gomes y Javier Naranjo

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