En diciembre de 1979 los Clash publicaban su histórico tercer álbum «London Calling» que en un principio iba a llevar por título «El Nuevo Testamento» pero la compañía discográfica dijo que ¡tururu!.
Ya he comentado en alguna otra ocasión que mis discos favoritos de los Clash son los dos primeros, los más punk. Aquí, sobre todo Mick Jones quería apartarse de la imagen de punk que habían dado con esos dos primeros álbumes y sorprendieron con un doble trabajo donde se dan cita desde las raíces del rock hasta el ska, el blues, o muchos de los estilos que se disfrutaban a finales de los años setenta.
La política seguiría siendo el eje central de sus letras, algo que nunca dejaron de lado, el desempleo, las drogas, la Thatcher, la guerra civil española, la pobreza…
El disco que unió a punks y rockers, ¿o no?
Por cierto, otro de esos discos que tenía en vinilo y me volaron, ¡cuánto cabrón!
En diciembre de 1999 la banda escocesa Oí Polloi publicaban su cuarto álbum de estudio,«Fuaim Catha» aunque anteriormente también tienen varios discos compartidos y un recopilatorio.
El título del álbum está en idioma celta escocés conocido como gaélico y se pronuncia «FOO-UM CA-HUH». Puede traducirse como «Noise of Struggle»: nuestra lucha por recuperar este planeta de los ricos, los gobiernos y las multinacionales que nos lo han robado a todos.
El disco viene acompañado con un folleto A4 de 20 páginas con letras, ilustraciones e información que explica la ideología de la banda. Un álbum nada fácil de conseguir en su edición original de 1999, pero existen reediciones. En cuanto a su sonido, es más cañero que sus anteriores publicaciones, acercándose más al hardcore y crust.
Foto por Koldo Orue.
