La música de Aaron Frazer se siente un poco como entrar en una máquina del tiempo porque tiene ramalazos a Curtis Mayfield y Carole King. El de Baltimore, batería y cantanta en la banda Durand Jones & the Indications, dice que estaba preparando la cena un día cuando recibió una llamada de Dan Auerbach de The Black Keys, preguntándole si podían hacer un disco juntos. Ese álbum en solitario, «Introducing …» , fue lanzado el pasado mes de enero.
El soul de los 70, combinado con ese mensaje en clave de Gil Scott-Heron, así como historias de amor inspiradoras contadas a través de una mezcla de música disco, gospel y doo-wop, fue grabado en una semana en el estudio antiguo y cargado de efímeros de Auerbach en Nashville luego de una rápida y prolífica sesión de composición en solamente 4 días.
Aaron Frazer ha creado un álbum que encaja perfectamente con las escenas dulces soul y low rider, con un propio lirismo que lo distingue del resto. Sombrío y personal, también hay una racha de celebración que hace que «Introducing …» sea un ciclo de canciones realmente potente, al que se unieron miembros de los Memphis Boys desde Daptone.
Riesgo y valentía inesperada en el debut de Aaron Frazer, atrevido en un mundo alejado de los entornos de la música sin pasión, alineándose con esa escuela de romanticismo que parecía cerrarse mucho antes de su nacimiento. Un disco que gusta por lo natural que se siente y auténtico como a Aaron Frazer, encarnación con voz dorada de aquella era dorada del Soul con Motown, encarnado en Smokey Robinson, Eddie Kendricks, Lamont Dozier, Donny Hathaway o David Ruffin.
ENGLISH:
Aaron Frazer debuts with Introducing…
Aaron Frazer’s music, reminiscent of Curtis Mayfield and Carole King, makes you feel like you’ve stepped inside a time machine. The Baltimore-based drummer and singer of Durand Jones & the Indications says he was cooking dinner one day when he got a call from Dan Auerbach (The Black Keys) asking if they could make a record together. That solo album, called Introducing…, was released last January.
The 70s soul, with its characteristic Gil Scott-Heron touch, along with inspiring love stories told through a combination of disco, gospel and doo-wop is loaded with Auerbach’s hallmark stamp and was recorded in just a week in the old studio in Nashville, after a speedy and prolific 4-day songwriting session.
Aaron Frazer has created an album that fits together perfectly with the sweet soul and low rider touches, with its own lyricism that sets it apart from the rest. Sober and personal, there’s also a celebratory streak that makes Introducing… a truly powerful set of songs, accompanied by members of the Memphis Boys from Daptone.
Aaron Frazer’s debut is full of risk and unexpected courage, daring, in a world far from the realms of passionless music, aligning itself with the school of romanticism that was seemingly long gone. What’s most enjoyable about this album is how natural and authentic it feels, just like Aaron Frazer, incarnating a golden voice of the golden era of Motown Soul, once embodied in Smokey Robinson, Eddie Kendricks, Lamont Dozier, Donny Hathaway or David Ruffin.
Translation by Jessica Jacobsen.
