La madrileña Meri Moon se llama en realidad “María a secas”, como decidieron sus padres, pero en su faceta artística ha dominado siempre el apodo recibido de los amigos. Lleva años puliendo un estilo propio para retratar a grandes músicos y recoger en trazos muy medidos la esencia de cada artista. Su carácter risueño y vitalista se traslada a una obra tan diversa como talentosa.
¿De dónde te viene esa pasión por pintar?
Pues la verdad es que me viene por mi abuelo Luis. Es arquitecto, pero pasa todo el día dibujando. Aún hoy, a sus 95 años, continúa haciéndolo. Debe ser de familia, porque lo que siempre me gustó fue dibujar. Es gracioso que la mayoría de amigos de la infancia me dicen que me recuerdan siempre dibujando, algo que he debido olvidar, pero por lo visto lo hacía hasta en cumpleaños, a mi bola con los lápices. En alguna borrachera también me ha pasado…
¿Tienes formación previa en Bellas Artes o lo tuyo es puro autodidactismo?
Siempre quise estudiar Bellas Artes, sin embargo mis padres prefirieron que cursara algo más cercano a la industria del cine. Ya que me iba a morir de hambre y no iba a pasar por el aro de estudiar lo que ellos me recomendaban… De modo que hacia el año 2001, me matriculé en la Diplomatura de Cine de Animación y Dibujos Animados 2D impartida en la ECAM (Escuela de Cinematografía y del Audiovisual de la Comunidad de Madrid). Era algo muy nuevo, de hecho, fui la tercera promoción.
¿Por qué te has especializado en músicos?
La música es mi otra gran pasión (ésta me viene de mi padre) y las caricaturas las disfruto muchísimo, pero hago otras cosas, según el encargo. Lo cierto es que durante los últimos años paso más tiempo con los músicos. Es de alguna manera mi agradecimiento a las grandes figuras de la música. Gracias a ellas hay más color en mi vida, moriría sin la música. Me parece mágico y maravilloso que el ser humano pueda crearla, así como el arte en general.
¿Qué buscas en cada músico cuando te pones a plasmar la ilustración?
¡Su esencia! Lo primero de todo, tanto en las ilustraciones de músicos como cualquier otra caricatura e incluso ilustración, es contemplar. Para mí es imprescindible y me encanta pararme a estudiar los rasgos de cada persona. Por este motivo puedo hacerlas, mejor o peor, pero sencillas y con pocos trazos. Pero sucede con casi cualquier dibujo, textura o forma… Contemplar es un regalo, se para el tiempo y permite que el cerebro, que es quien realmente dibuja, haga su trabajo y te permita llevar al papel el niño interior de cada personaje. Además, considero que lamentablemente es una capacidad que estamos perdiendo.
¿Llamas a tu trabajo caricaturas o de otra forma?
Ja, ja, ja, ja pues según. En cuanto a las ilustraciones de los músicos sí, al igual que los encargos de caricaturas de particulares que realizo. Pero hago muchas otras cosas que no reflejan personajes reales.
Alguna referencia de dibujante que te haya inspirado o es estilo propio, personal e intransferible.
La verdad que la lista de artistas que admiro es interminable. Probablemente todo lo que observamos en el día a día, cientos de imágenes, nos va influyendo sin siquiera ser conscientes. Por lo general, me suelen decir que tengo un estilo muy mío, eso me gusta porque no debe recordar a nadie y realmente creo que es así. La verdad es que tres de mis cómics favoritos son Joe Bar Team, Blacksad y los de Sarah´s Scribbles (muy recomendables todos y cada uno de ellos), pero en ninguno veo una influencia en mis dibujos o ilustraciones, quizá en el tipo de humor sí. Un estilo con el que sí que puedo relacionar los estilos de los fondos que empleo es la UPA (United Productions of America), fundada en 1941, es decir, en tiempos de la Segunda Guerra Mundial, por varios animadores de los Estudios Disney, quienes se lanzaron a la huelga para finalmente abandonar al gigante de la industria de la animación, conocido por “todo lo que no puedo superar lo compro o lo destruyo”.
Y es que, descontentos con respecto a las condiciones en las que trabajaban y limitados a la hora de poder continuar investigando e innovando en sus intereses artísticos (pues Disney no les daba ningún tipo de libertad, empeñado en continuar con ese estilo ultrarrealista que presentaban sus animaciones), decidieron abandonar los estudios definitivamente. Dos de sus personajes principales eran Mr. Magoo y Gerald Mc Boing-Boing. En cuanto al estilo de línea, tengo clarísimo que es un estilo propio que me viene de la época en la que realizaba bocetos de los personajes que llevábamos a la animación. Es la línea que doy con el lápiz y la tinta para llevarla posteriormente al color por ordenador.
¿A qué atribuyes la fecunda y larga relación de dibujos y rock?
Debido al Covid y no poder realizar sesiones de fotos…ja, ja, ja. La verdad es que tanto la ilustración como la animación se han llevado al mundo de la música, ya sea en videoclips, cartelería o portadas de discos. Considero que la relación música/dibujos es bidireccional y ancestral, al igual que la admiración entre ambas disciplinas. Podría poner mil ejemplos (aquí también incluyo la animación y el diseño gráfico), pero me quedaré con las animaciones de los videoclips de Zappa realizados por Bruce Bickford en línea y arcilla (ambos se admiraban y he ahí el resultado). Pero hay mil más: la Velvet Underground y Warhol; Banksy y Blur; Jamie Hewlett y Gorillaz; Janis Joplin y Robert Crumb o el diseño gráfico realizado por el colectivo Hipgnosis…responsables de las portadas de muchos de los mejores álbumes de la historia. También tenemos a Bob Dylan, quien comenzó a pintar sus propias portadas o a Lennon y sus dibujos…
Tu portada favorita de todos los tiempos es…
Sin duda la del álbum “Hijos del Agobio” de Triana. Ya muy pequeña, pasaba horas mirando esa portada, me parecían alucinantes los dibujos. Una mezcla entre miedo, curiosidad y admiración. Recuerdo que uno de los personajes tenía una lengua que le salía de la tripa, a otro le salía un tenedor, ja, ja, ja, ¡buenísima!
Sí, definitivamente esa portada, no tengo que pensarlo mucho. El autor fue Máximo Moreno, pintor y fotógrafo andaluz quien realizó otras portadas para este grupo como la de “El Patio”, con la que también eché bastantes ratos. Dios, qué temazo “Abre la puerta”. Mi padre tenía muchos vinilos y me encantaba estudiar las portadas.
¿Puedes contar cómo es el proceso creativo en tus ilustraciones?
Pues la verdad es que es exactamente el mismo: lo primero que hago es escoger al artista. Esto viene dado porque he escuchado su música hace poco, he visto un documental o simplemente me he acordado de él ese día, es como si me hiciera, toc, toc, hoy toca. Una vez lo tengo claro, busco documentación, fotos, videos… Como he dicho antes, contemplo y profundizo en sus expresiones, gestos y manera de actuar. De igual forma lo hago con la tipografía que mejor le va o más le representa, esa que relacionamos con él en el mundo de las ideas. Cuando ya nos conocemos mejor, agarro el lápiz y lo llevo al folio. Trabajo siempre en tamaño Din-A3, porque me permite dar espacio a los detalles. Una vez está abocetado, doy paso a la tinta, Pilot negro de 0.5 y 0.7. La línea es especialmente importante, pues tal cual aparecerá en la ilustración terminada. Una vez lo tengo, hago foto y directo al Photoshop para darle color al fondo y al personaje. En este punto también me documento bastante. De hecho me centro siempre antes en la estética y color del personaje, de manera que el fondo no condicione Cuando lo hago al revés, no suele funcionar.
Has trabajado con músicos como Ángel Guache o Antonio Hernando…
La verdad es que ellos han sido los últimos, y espero se animen muchos más artistas, porque me apasiona. Pero vengo haciendo carteles y diseños, incluso caricaturas, desde al menos 2010, momento en el que abandoné la gestión cultural en eventos, cinematografía y festivales de cine para fundar mi propia productora, “Altona Producciones”, integrada por grupos de música e improvisación de teatro musical. Cesó su actividad hace años, pero era manager, productora, conductora y además la diseñadora.
¿Cuál sería el encargo ideal que esperas?
¿Bien pagado y prolongado en el tiempo? Ja, ja, ja. Lo ideal es que continúe sorprendiéndome la vida. Me encanta compaginar distintos proyectos en duración, temática y estilo. Recientemente he realizado un Cómic de 84 páginas para UNAD (Unión de Asociaciones y Entidades de Atención al Drogodependiente). La verdad es que no íbamos con mucho tiempo, pero ha sido una maravilla pues el relato (escrito por María Navas y cuyo argumento tiene como objetivo concienciar frente al consumo de sustancias y el SIDA de una manera muy elegante) es una pasada. Aparte de eso, desde que comenzó el año, he realizado el diseño de un par de discos, he participado en un calendario solidario, he realizado caricaturas personalizadas, ilustraciones para artículos musicales en medios, tengo mi propia línea de textiles…La verdad es que me gustan los proyectos que van saliendo pero, a veces, me gustaría tener más volumen de trabajo.
Más información de Meri Moon en:
Sito web: www.merimoondesign.com
Facebook: merimoonmoon
Instagram: @merimoonmoon