«Where Shall We Begin’ cierra el capítulo sobre un período formativo para la compositora británica de Gloucestershire, Chloe Foy. Después de perder a su padre a causa de la depresión, Foy se embarcó en un período de diez años en el que siguió incansablemente su trayectoria profesional mientras también lidiaba con las consecuencias internas y externas de perder una figura influyente tan joven.
Foy comenzó a llamar la atención en 2013 cuando su canción debut «In The Middle of the Night» comenzó a sonar en la radio. «Flaws» y «Asylum», posteriormente trajeron más seguidores con cerca de 8.5 millones de reproducciones de Spotify y sus apariciones en festivales siguieron poco después: SXSW en 2018, Greenman y Cambridge Folk Festival en 2019, aumentaron su popularidad.
‘Where Shall We Begin’ es el sonido de alguien que ha pasado años trabajando. Un disco que ha surgido de una década de trabajo duro, tratando de equilibrar su oficio con ganarse la vida, todo mientras lidiaba con las consecuencias de una pérdida y de averiguar quién su verdadero yo en aquel contexto. Inspirado por compositores como Gillian Welch, Edith Piaf y Tyler Ramsay, y productores como Blake Mills y John Congleton, el álbum fue grabado en Pinhole Studios en Manchester.
Todo se suma para compensar una escucha relajante e increíblemente vulnerable. Un álbum que podría mecer a un bebé para que se duerma y, en el extremo opuesto del espectro, inspirar una profunda auto excavación y un análisis existencial. Canciones que exponen los secretos más íntimos y profundos de la intérprete. Maravilloso disco repleto de intimidad y, de alguna manera, logra llevarlo con canciones con expresiones de angustia y revelación a un final tranquilo y feliz.
