El tsunami de la pandemia Covid19 ha tapado muchas iniciativas editoriales de gran valor ante un planeta perplejo que se ha entregado a una lucha sin cuartel contra la enfermedad, salvo algunas excepciones tan disparatadas como cercanas. El libro Los 100 Mejores Discos de Rock en Directo (Efe Eme) apareció justamente en marzo de 2020, en el peor momento para pensar en cosas distintas a la supervivencia, y es necesario evitar que este trabajo se olvide entre el alud de informaciones amontonadas desde entonces. Ahora que la ciencia permite ver una salida a medio plazo a este desafío, puede ser buen momento para hacer justicia a una obra de gran calidad cuyo valor debe reconocerse entre el panorama periodístico musical.
Tito Lesende (A Coruña, 1971) ya había dado muestras de su talento como escritor en 201 discos para Engancharse al Pop/Rock Español (2006) y Revolver: El Disco que Revolucionó el Rock (2016). Con esta nueva entrega vuelve a exhibir su capacidad para escribir de maravilla (algo más infrecuente de lo que se podría pensar) y aúna el conocimiento con la eficaz orientación al lector que necesita un GPS ante el océano de discos en vivo existentes.
Las 216 páginas de la obra están magníficamente trazadas. Tanto que el periodista Fernando Neira escribe (en el prólogo titulado “De por qué usted y yo somos contingentes pero este libro era necesario”) que el autor gallego es “nuestro Nick Hornby particular”. Se trata de un piropo de altos vuelos, pero no un ditirambo desproporcionado porque la riqueza expresiva, la capacidad de síntesis y la precisión de los datos sitúan la obra entre los textos de referencia. No sobra una palabra y la economía de recursos es muy destacable, si bien el tratamiento fotográfico parece pobre en comparación.
De la selección se puede asegurar que son todos los que están, pero cualquier tamizado musical deja fuera universos inabarcables. Hornby, ya citado, rehace constantemente en Alta Fidelidad o en el imprescindible 31 Canciones, sus listas de favoritos, por ejemplo, una manía muy extendida entre los melómanos. Lesende se ha empeñado en no cometer errores graves para Los 100 Mejores discos de Rock en Directo. Y lo consigue…
Tal vez por eso, Lesende explica la metodología y criterios empleados en su libro: dos tercios de los discos reseñados se dedican al rock en vivo de “código anglosajón” y el resto son referencias adicionales. Y es rock entendido en un sentido amplio de la palabra, porque el primer álbum reseñado es de Joan Baez (septiembre de 1962) y el último es Before the Dawn, de Kate Bush (imprescindible la biografía de Juan Vicedo, en Sílex, que acaba de estrenar su trabajo sobre David Bowie). Son dos mujeres para abrir y cerrar, pero la presencia del género masculino es abrumadora y así lo reconoce el autor. Rock y testosterona son un maridaje clásico.
Los amantes de la música disfrutan de mil formas el sonido, pero podría dividirse en tres placeres la fórmula para el orgasmo auditivo: paladear los discos de estudio, disfrutar de los conciertos y gozar con los discos en directo de los artistas favoritos. El libro de Tito Lesende es clave para ayudar en esta última forma de alborozo.