Si alguien gusta de los culebrones, sin duda el mundo de Yes puede hacer las delicias de los adictos a estos productos televisivos. Parece ser que Rick Wakeman, Trevor Rabin y Jon Anderson han aparcado definitivamente su proyecto musical bajo el nombre de ARW, mientras que Steve Howe sigue adelante con su actual versión del grupo. Tras la sentida muerte de Chris Squire en 2015, continúan en la nave Jon Davison, un vocalista que calca la voz de Anderson —no en vano procede de una banda tributo a los británicos— y los antiguos compinches Geoff Downes, Billy Sherwood y Alan White.
La actual formación ha jugado a dos bandas tirando de nostalgia mediante varias giras en las que interpretan en su totalidad sus álbumes clásicos. Este 2022 le ha llegado el turno a “Relayer” (1974) que podremos escuchar, siempre que la pandemia lo permita, los próximos 13 y 14 de mayo en Madrid y Barcelona respectivamente. Pero no contentos con eso también se pasan de tanto en tanto por el estudio para grabar material nuevo aunque este acabe recreándose en los sonidos que convirtieron a Yes en una ineludible referencia del Rock Progresivo.
Desde luego, una vez escuchado “The Quest” (Sony, 2021), su nuevo álbum de estudio, lo de renovarse o morir no parece que vaya mucho con Howe que, bajo su batuta, hace que este trabajo parezca grabado durante los años setenta y que suene un tanto añejo. Eso no quiere decir, por cierto, que estemos ante un mal trabajo y encontramos pasajes instrumentales absolutamente deliciosos desde la inicial “The Ice Bridge” hasta llegar a momentos muy cercanos a una banda sonora en “Dare to Know” con unos atinados arreglos orquestales. Siendo justos, esta obra supera claramente a su predecesor, el inconsistente “Heaven & Heart” (2014), aunque estos veteranos no parezca que deseen quitarse de encima la etiqueta que les hizo célebres a menos que un inesperado giro de guión acabe por sorprender al personal.
