Totalmente conmocionados. Ha muerto Dallas Good a los 48 años de edad, el alma de The Sadies junto a su hermano Travis. Murió el pasado jueves 17 de febrero por causas naturales mientras estaba bajo el cuidado de un médico por una enfermedad coronaria descubierta a principios de esa semana.
Desde su formación en 1994, Sadies ha desarrollado, incluso perfeccionado, un estilo de música que es exclusivamente suyo. El mes pasado, la banda compartió su último sencillo, “Message to Belial”, producido por Richard Reed Parry de Arcade Fire. The Sadies fueron fundados por Good y su hermano Travis en 1994, lanzando su álbum debut ‘Precious Moments’ en 1998.
Aunque los Sadies lanzaron aproximadamente 20 discos a lo largo de su carrera, la banda se hizo más conocida por sus trascendentes conciertos, donde el cuarteto mostró su variedad de influencias, desde el country y el western hasta el folk-punk y el garage rock de los años sesenta. Son casi únicos en el sentido de que los Sadies nunca han tenido un éxito o algún tipo de momento dorado, básicamente desarrollando toda su base de fanáticos y seguidores tocando en bares y salas pequeñas y tugurios.
¿Hablar de The Sadies y de Dallas Good?, al que he tenido el privilegio de entrevistarlo. Quizás de The Sadies sean una de 5 las mejores bandas de rock ‘n’ roll que haya visto en directo. Los Sadies eran realmente una extensión de Dallas. La química que compartió con su hermano, Travis Good, y sus hermanos de la banda, Mike Belitsky y Sean Dean, fue materia de leyendas. Si los Sadies estaban juntos en una habitación o incluso en algún campo, algo se añadía al aire: una presencia, algún tipo de magia. Como quieras llamarlo, lo tenían.
¿Y aquella canción «This Wheel’s On Fire» con Garth Hudson, Neil Young y The Sadies acompañando? Tremenda maravilla aquel disco «A Canadian Celebration Of The Band» es una colección ecléctica de canciones, desde las más oscuras hasta las clásicas, con el propio Hudson seleccionando a todos los artistas para actuar con él en el álbum que incluía a Neil Young, Bruce Cockburn, Blue Rodeo, Cowboy Junkies, The Trews, Great Big Sea, Hawksley Workman, Mary Margaret O’Hara, Chantal Kreviazuk, Raine Maida e Ian Thornley, entre muchos otros. Para mi, el tema favorito del disco.
No era solo que fueran virtuosos como letristas, arreglistas y músicos que trabajaron tan duro, posiblemente podría verlos tocar muchas veces cuando nos visitaban e incluso varias veces en Estados Unidos. Los trajes elegantes, el talento para el espectáculo, las bromas durante sus conciertos, la maldita profesionalidad, esa percepción es que mucho de eso fue impulsado por la sensación de Dallas de que podría ser una fuerza positiva en este mundo.
Muchos de los primeros discos de la banda se convirtieron en clásicos de culto, ganando seguidores como Ron Sexsmith, The Sheepdogs y Erin Rae, quienes publicaron tributos a Good tras su muerte. Los Sadies también desarrollaron una reputación como una banda de apoyo en demanda, colaborando con artistas como Jon Langford, Neko Case, Andre Williams y Justin Townes Earle de los Mekons.
La lista de personas relacionadas con los Sadies y conciertos memorables es impresionantemente interminable. Todo lo que puedo decir es que Dallas Good mejoró la música y eso hizo que el mundo fuera mejor. Era realmente uno en un millón, y todos los que amamos la música y los Sadies en todo el mundo no seríamos lo mismo aquí sin él. Me parece imposible que se haya ido. No puedo comprenderlo. DEP.
Fotos Ana Hortelano.
