Dicen que «el tiempo es un amigo indomable, ese que todo el mundo quiere controlar pero nadie lo consigue. El tiempo lo es todo». Puede que esa reflexión sea la base de su nombre Los Eternos, una formación de Cedeira (La Coruña) que descubrí no hace mucho, gracias a la gente de Milanamusica, donde han editado un par de trabajos «Vientos Solitarios»(2019) y el reciente «Sonora»(2021) que se suman a un primerizo álbum que editaron ya hace unos cuantos años con la multinacional Warner, «Back on the Road » (2010).
De su reciente trabajo comentan en una reciente entrevista que «este disco es menos americano que el anterior. Tira algo más hacia el folk y el wéstern, con esa influencia del pop, que siempre está ahí. Aunque, por supuesto, el country sigue siendo nuestra base. La steel nos marca mucho y es un instrumento que está ligado al country y al folk americano de toda la vida», y despues de llevar un buen número de años en este negocio reconocen que a estas alturas solo piensan en pasarlo bien alejándose de la faceta comercial de la música, «nunca pensamos, ni por un momento, en hacernos ricos. Ni siquiera en vivir de esto. Pero es que nosotros sin la música no sabríamos qué hacer», añaden.
Una formación, que se mueve entre la música Country, la Americana y el Dark Country, que convenció y se convirtió en la gran triunfadora (aunque todas tienen este título) de una noche fría y con niebla, pero que dentro del Teatro Álvaro de Luna se convirtió en una jornada caliente y llena de sonidos, por descubrir, con un notable interés. Temas de sus dos trabajos al que se añadieron un par de versiones homenajeando a ídolos que les han marcado, empezando por Gram Parsons y su tema «One hundred years from now», al que por temas de edad no todos en la banda controlan y acabando por el canadiense Neil Young y su versión de «Four string winds» que compuso Ian Tyson, y que da título a su primer trabajo de esta nueva etapa con el título de «Vientos solitarios».
Cudi, guitarra y voz; Chewis, guitarra; Torres, bajo y coros; Cesar Yañez, a la batería junto al ausente Álvaro Lamas al pedal steel son sus integrantes, un quinteto que lleva muchos años tocando y componiendo, trabajado en equipo, aportando todos juntos en un sueño, tratando de hacerlo lo mejor posible, con el objetivo de seguir aquí, en esta aventura, mientras los dejen. Una formación que ya nos había enamorado antes de verlos, pero que al acabar la noche solo podemos decir que contamos los días para poder disfrutar de ellos, otra vez, sobre un escenario, aunque como dicen «el tiempo todo te lo da, pero, cuidado, también todo te lo quita. Inexorablemente, como decimos en la canción, llegará el día en que el tiempo también nos quite de aquí», esperemos que ese tiempo se detenga un poco, y nos de «la oportunidad» de poder disfrutar otra vez de ellos.
Fotos Jesús Díez.