Menos mal que todo sigue igual. O casi. Esa es la sensación de volver a disfrutar de Wilco en directo, esta vez gracias al Festival Cruïlla, en su edición XXS con shows fuera del recinto del Fórum.
Público heterogéneo, dentro de un orden, que por supuesto se sabía todos los temas incluso los del nuevo trabajo de los de Chicago y que no podía reprimir las lágrimas en «Jesus, Etc», «California Stars» o «Hummingbird».
Me fascina pensar en las mil historias que habrá detrás de esas lágrimas; casi tanto como la perfección de Wilco como compositores de piezas que repasan todas las sonoridades de la música americana, pero con una identidad que los hace ya eternos.
En definitiva, un concierto con un sonido de lujo, marca Wilco, y un setlist de ensueño que dudo dejara descontento a alguien.
Texto por Bel Lepikson. Fotos Desi Estévez.