Gregory Dwane vuelve a publicar nuevo disco con «XX», quien también nos regaló el año pasado un fenomenal trabajo homónimo.
Después de una carrera produciendo y actuando con otros artistas como Amy Ray (Indigo Girls), Le Tigre, The Butchies, entre otros, pone sobre la mesa canciones desgastadas al estilo, algo de guitarra eléctrica y violín humeante, y algunos riffs de rock clásico en buena medida, todo equivale a un sonido infeccioso que es tan refrescante como retro por parte del de Carolina del Norte.
En la década de los 90, Dwayne dejó la vida de pueblo pequeño y se dirigió a Nueva York, donde comenzó a tocar en bandas de punk y finalmente a producir música. Su largo y sinuoso viaje a través de la industria lo llevaría de un lado a otro entre Nueva York, Los Ángeles y Trinity; a través de un giro inesperado como padre joven y años de abuso de alcohol, uniéndose al equipo de gira de Alanis Morissette, trabajando con Dave Navarro y Macy Gray, acuerdos discográficos importantes y dirigiendo la producción de dos discos en solitario para Amy Ray de The Indigo Girls.
Durante la pandemia, como muchos de nosotros, Dwane descubrió que tenía mucho tiempo libre. Se sumergió en el álbum “Golden Hour” de Kacey Musgraves, redescubrió el disco “Ladies Love Outlaws” de Waylon Jennings y encontró su archivo personal de viejas demos, algunas de las cuales tenían más de 20 años. El resultado, se lanzó el otoño pasado cuando Dwane lanzó su debut en solitario, un disco homónimo de country alternativo que recuerda a Kris Kristofferson en el apogeo de sus poderes.
Las canciones reflejan a un hombre que busca el equilibrio y la comprensión, reconoce las duras lecciones de la vida y las experiencias alegres, contempla la fragilidad masculina, la conciencia social y se abre a sus heridas y traumas pasados.
Este junio pasado, Dwane nos entregó su segundo trabajo, titulado «XX».