Los barceloneses The Grassland Sinners publicaron el pasado mes de septiembre «Goin’ Fat». Segundo álbum de estudio 5 años después tras «Let it Ride» con la formación actual integrada por Jacin Castrillo, Aleix Lozano, Ferran Bruach, David Mani y Edu Rodríguez. Santiago Campillo (M-Clan), Dani Nel.lo (Los Mambo Jambo, Los Rebeldes), David Gnaposs y Héctor Martín colaboraron en el disco. El disco de 11 temas se grabó en los estudios Cucumber Factory de Mataró (Barcelona) con Edu Rodríguez y Luís Rodríguez a la producción, bajo la pre producción y mexclas de Dani Alcover.
Los Grassland Sinners vuelven a abordar su revisión de raíces salvajes con agallas un discazo como «Goin’ Fat», dejándose la piel en cada una de sus once canciones con tanto aplomo como si las llevaran tatuadas en su código genético. Rock potente con baterías y guitarras épicas y rumiantes que resonará más allá de las cocinas. Ellos continúan recorriendo la evolución natural de su sonido, siempre incorporando elementos novedosos para no repetirse, lo que mantiene en un alto nivel lo excitante, urgente e intensa que suena su propuesta.
«Goin’ Fat» es un claro testimonio de energía, control y maestría. Casi 45 minutos de libre expresión musical de un viaje que despega y aterriza en la década de los setentas. El revisionismo y revitalismo no es nuevo en la historia de la música, y sólo hay dos formas de encararlo: ir directo a la fuentes rescatando el sonido primigenio y sin alteraciones, o, tomar los ingredientes base y alterarlos y modificarlos hasta obtener un nuevo elemento derivado. Claramente The Grassland Sinners tomaron el segundo camino para bien. Pulgares arriba.
