Hemos trotado al son de Band of Horses durante una tarde noche gloriosa el pasado 20 de noviembre en la madrileña sala la Riviera. Un talento desbordante y un repertorio perfecto que han salvado un bolo que podría haber muerto en el intento por la voz rota de Ben tras una larga gira, el sonido de la sala y las carencias evidentes del nuevo guitarrista.
Problemas internos, la partida de dos miembros de la banda desde hacia mucho tiempo despidiendo al anterior guitarrista de la banda, Tyler Ramsey, y al bajista Bill Reynolds en 2017, después de una década (y tres álbumes) juntos.
El reemplazo de Ramsey, Ian MacDougall, grabó el álbum y luego lo dejó, una pandemia que empujó la gira hacia otras fechas y para el líder de Band of Horses, Ben Bridwell, las cosas no salieron según lo planeado. “Las cosas van genial”, dicen en su último disco puede entenderse irónicamente.
Ellos se han tomado su tiempo con un nuevo álbum cuyo título es esperanzador y positivo. Como ninguna otra banda, canalizaron el miedo de toda una generación en los años 2000 y le dieron forma musical. Con su furioso álbum debut ‘Everything All The Time’ y el exitoso álbum ‘Infinite Arms’ establecieron su leyenda. Ahora Band of Horses han vuelto a sus orígenes con el nuevo disco que presentaron en Madrid.
Pero ni con esas se doma a estos corceles. Fantásticos Band of Horses.