Si el multiinstrumentista norteamericano Sandy Bull hubiese sido británico, seguro que lo hubiesen colocado en el panteón de guitarristas innovadores como Bert Jansch, John Renbourn, Richard Thompson o Davy Graham. Inspirado su estilo de tocar la guitarra en Hamza El Din, Chuck Berry, Pops Staples y Carl Orf, híbridos que no se puede duplicar hoy en día. Justo cuando estaba construyendo una reputación, su falta de confiabilidad, destruyó su carrera como músico. Para cuando se enderezó, nadie quería arriesgarse con él. Así que se mudó a Nashville y participó en sesiones de selección con personas que no tenían idea de con quién estaban jugando.
Sandy Bull, que grabó menos de una docena de álbumes entre su debut en el 63 y su muerte en 2001, apenas recibió el reconocimiento por la industria y prensa especializada, a pesar de haber sido un innovador en guitarras acústicas, eléctricas y de pedal steel, laúd, banjo, bajo, sarod y con la tecnología disponible de su tiempo.
Bull, nacido en Nueva York en el 41 como Alexander Bull, estaba efectuando fusiones sin esfuerzo de folk, jazz, música clásica y world music en un momento en que otros elogiaban el folk-pop de Donovan y la Incredible String Band. Bull se superpuso a sí mismo en el estudio y cuando tocaba en directo desplegó una caja de ritmos primitiva y cintas suyas de apoyo para tocar.
Su adicción a las drogas lo alejó del juego durante unos años en los albores de los años setenta, justo cuando debería estar disfrutando de su mayor éxito. Pero antes de eso, había creado un cuerpo de trabajo pequeño pero impresionante, especialmente en sus dos primeros álbumes, «Fantasias for Guitar and Banjo» (1963) e «Inventions» (1965), y su tercer álbum «E Pluribus Unum» (1969), fueron grabados para el atrevido sello Vanguard cuyo eslogan durante un tiempo fue «Recordings for the connoisseur» lanzando discos folk, blues, Country Joe and the Fish, Buffy Sainte-Marie y John Fahey. Bull estaba en aquel momento en la vanguardia de la música folk de entonces.
Sandy_Bull se interesó por la música árabe e india (mucho antes de que el sitar entrara en el raga-rock) y tocó en el Newport Folk Festival, aunque no aparecía ni en la letra pequeña del cartel. Eran tiempos de revolución y el momento de los Beatles, Rolling Stones y de Bob Dylan que apenas se estaba haciendo un nombre con canciones originales y ni la música árabe ni la india habían entrado en el léxico del folk o el rock. Gracias a Patti Smith admiradora del cuarto álbum de Bull, «Demolition Derby» en el 72, hizo que se unises a la compañía del Rolling Thunder de Dylan en el 75, pero no fue hasta los años ochenta que volvió a grabar.
Su álbum de 1988, «Jukebox School of Music«, también lo encontró tocando sarod, que había aprendido del maestro Ali Akbar Khan. A finales de los noventa se instaló en Nashville donde tenía un estudio y montó su propio sello Timeless Recording Society. Tocó sarod en el álbum «Beneath My Wheels» de Kevin Welch y oud en Cruel Inventions de Sam Phillips . Habría otros discos antes de su muerte, y dos discos en directo póstumos: Still Valentine’s Day 1969 lanzado en 2006 y Sandy Bull and the Rhythm Ace Live 1976, él con su caja de ritmos y cintas de acompañamiento- que salió en el 2012.
Sandy Bull fue un músico mundial y un ciudadano mundial en los sentidos más verdaderos de esas descripciones, y que sus melodías podrían ser perfectamente un country rock útil si alguien las hubiera cantado.
Su estilo finger-picking siempre fue comparado con el de John Fahey y Robbie Basho (de la discográfica Takoma, en los años sesenta. El guitarrista Thomas Guthrie atribuye a Sandy Bull como una gran influencia en su carrera como intérprete.
NO MUSIC. NO LIFE. PLAY IT LOUD, MUTHA! FUCK YOUR SPEAKERS. MAKE ART NOT FRIENDS. MUSIC IS MEDICINE
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