Hartmann, la banda liderada por el guitarrista Oliver Hartmann, pasó por la madrileña sala Silikona el 17 de febrero dentro de su gira por nuestro país presentando su último disco «Get Over It». Implacables seguidores del hard rock se reunieron en una ceremonia fraternal consiguiendo un ambiente entrañable. Hubo que esperar el tiempo necesario para ajustar, desde la mesa de mezclas, todos los instrumentos y sonaran al gusto del protagonista de la noche. Actitud minuciosa y perfeccionista la del alemán, para quitarse el sombrero, hasta que no consiguió el sonido perfecto no empezó el concierto. Su paso en formaciones como At Vance, Avantasia e innumerables colaboraciones con otras bandas le han aportado una reconocida experiencia y profesionalidad que se palpa desde los primeros acordes.
Veteranía y estilo encima del escenario para dar comienzo con «Can´t Stop The Rain» de su penúltimo trabajo «15 Pearls & Gems». Obertura que da paso a sus recientes composiciones «One Stop Behind», «What You Give Is What You Get», The Gun». El resto fue un pequeño y selecto repaso a su carrera en solitario donde interpretaron temas tales como «Walking On A Thin Line», «Don´t Want Back Down», «The Sun´s Still Rising», «I Won´t Get Fooled Again» o «Simple Man» para regresar a su último disco con «In Another Life». Temas a medio tiempo, baladas, suntuosas melodías… y elegancia, derroche de elegancia. Afinidad personificada en cada composición donde el rock melódico y los pulcros riffs de guitarra fueron los protagonistas.
Con el público metido en el bolsillo, los músicos andaban como pez en el agua….todo iba viento en popa. «Cold As Stone», «After The Love Is Gone», «Don´t Give Up Your Dream» daban paso a la recta final del concierto recuperando «Alive Again» y «Out In The Cold» de su primer disco. Fin de fiesta con una reducida versión de ABBA. En un concierto no solo es interpretar temas a la perfección, cada músico debe saber, colocarse, estar, moverse… encima del escenario, cualquier gesto, sonrisa, broma… es motivo para arrancar la atención del público y tenerlo pendiente en cualquier momento. Dennis Ward al bajo, Markus Nanz a los teclados, Oliver Schulte a la batería y Oliver Hartmann a la guitarra y voz, lo lograron, su actuación fue la comunión perfecta entre público y músicos. Si a todo esto se le suma la gran calidad musical que ofrecieron pues poco se puede pedir más…. al final tod@s satisfech@s.
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