Cada 6 de marzo se celebra el aniversario de «Closing Time» el lanzamiento del disco debut de Tom Waits en 1973.
Un tipo que prefirió la variante Jack Kerouac y Charles Bukowski. Una docena de canciones empapadas en alcohol a cargo de un personaje feliz que canta sobre la infelicidad, el primo lejano y disipado de Leonard Cohen, y llevando la canción de bar un poco más lejos.
Porque Tom Waits le cantaba y le canta no al estar borracho sino al tener resaca. Entre el jazz, el blues y las baladas country, sus melodiosas canciones de guitarra acústica son algunas de las más bonitas de Tom en toda su discografía.
‘Ol 55’ conserva su calidad después de pasar por el escurridor Henley, ‘Old Shoes’ es pegadiza y encantadora, y ‘I Hope That I Don’t Fall In Love With You’ es sentimentalismo instantáneo. No dejes que sus fusiones de género te asusten. Entonces, lo que no es una canción de jazz pura como ‘Virginia Avenue’ y ‘Midnight Lullaby’ es una balada de piano con una sección de cuerdas.
El debut de Waits contiene la mayor parte de las semillas de lo que estaba por venir con esta mezcla maravillosa de soul, jazz, country y fragmentos de folk e instrumentación cruda. Grandísimo disco de principio a fin. Existen discos igual de buenos que «Closing Time» (1973) de Tom Waits, pero no mejores…
NO MUSIC. NO LIFE. PLAY IT LOUD, MUTHA! FUCK YOUR SPEAKERS. MAKE ART NOT FRIENDS. MUSIC IS MEDICINE
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