Estuvimos el pasado 10 de marzo con los Pixies en una noche de Wizink Center que demostró la solvencia de una banda que conserva uno de lo mejores directos que existen. Una máquina perfectamente engrasada que ejecuta los temas como si fueran una producción de estudio.
Con una calidad inesperada para el audio de este arena en su formato suelo, cortinas y grada extensible. La descarga sólo se vio nublada por la cantidad de idiotas por metro cuadrado que habitan la pista de este tipo de bolos.