The Northern Belle lanzan su quinto trabajo, “Bats In The Attic”. La escena escandinava de “Americana intoxicada melódicamente por ABBA” cuenta con ellos como uno de sus representantes más interesantes. Marcus Forsgren produjo el disco, con la banda como coproductora. La banda está liderada por Stine Andreassen (voz/guitarra), pero es muy numerosa. Se completa con Bjørnar Ekse Brandseth (guitarras, pedal steel), Johanne Flottorp (violín, armonías), Trym Gjermundbo (batería), Ole-André Sjøgren (guitarras, armonías) y Marie Tveiten ( guitarras, armonías).
Escucha “Bats In The Attic” de The Northern Bell aquí:
La vida, la muerte y un montón de cartas de hace 60 años forman la base del álbum. Éste consolida su estatus como pioneros en la escena nórdica. Al mismo tiempo, el nuevo material incorpora una mezcla diversa de estilos, desde pop tipo Cardigans, pasando por rock sureño y frágiles baladas indie. Todo ejecutado con la delicadeza musical que caracteriza a la banda.
Después de haber lanzado dos álbumes exitosos y bien recibidos durante los años de la pandemia sin poder girar, las ganas de los integrantes de la banda por tocar en vivo eran intensas. Este impulso se cultivó en el estudio, donde pretendían recrear la potencia de sus shows en vivo.
La líder de la banda y compositora Stine Andreassen se inspiró en 379 cartas enviadas por su abuelo, cuando estaba en el mar y destinado en el extranjero, a su abuela en el norte de Noruega. El título del disco y varias de las canciones hacen referencia a estas cartas, que permanecieron escondidas en un desván durante 30 años tras el fallecimiento del abuelo. Otras canciones del álbum tratan de la experiencia de Andreassen al convertirse en madre por primera vez (la creación de vida), mientras que otras tratan de lo contrario: la pérdida de amigos cercanos.
The Northern Belle lanzó su álbum debut homónimo en 2015. El segundo álbum “Blinding Blue Neon” fue nominado al Spellemann (Grammy noruego). “We Wither, We Bloom” fue su primer lanzamiento internacional y recibió grandes críticas. Una versión de “Chicago” de Sufjan Stevens en “The Women in Me” (2021), grabada con Darling West, Ida Jenshus, Louien, Malin Pettersen y Signe Marie Rustad, aumentó aún más el prestigio de la banda. En este disco brilla su mezcla de folk y pop de inspiración americana, cargado de grandes armonías, pedal steel y el exclusivo violín de Hardanger.
Está claro que este es un disco más pop que americana, como los últimos discos de Kacey Musgraves. ¿Es algo malo? Cuando las canciones están bien escritas y llenas de buenas voces femeninas y la música está pulida con delicadeza es difícil resistirse. Aunque está claro que nos gusta más cuando dan paso a las guitarras ardientes y se acercan –con timidez- al rock sureño. Además, saben tirar de ironía en títulos como “Even Dylan Can´t Make This Right”. Un disco no apto para fundamentalistas, pero que contentará a los amantes de las buenas canciones. Llamado a ocupar el lugar del fantástico trabajo de Signe Marie Rustad que tanto sonó en nuestro reproductor el año pasado.