Calder Allen y sus historias de soñadores, vagabundos y fugitivos

Calder Allen, texano de quinta generación, lanza su segundo disco, “Dreamers, Drifters, and Hiders”. Nacido en una familia con rica tradición musical, Calder lleva con orgullo el legado de su abuelo, Terry Allen. Producido por Charlie Sexton, amigo de toda la vida de la familia, el álbum ofrece un viaje musical ecléctico a través de sus 11 temas. Este álbum lleva a los oyentes a lugares inesperados, mostrando un sonido rico pero único que combina influencias tradicionales y modernas. Si bien la guitarra acústica establece el ritmo fundamental, el álbum se aventura a través del espectro musical, incorporando una amplia gama de instrumentos.

Escucha “Dreamers, Drifters, and Hiders” de Calder Allen aquí:

Calder dejó su huella desde su debut con “The Game” en 2022 y ha ascendido rápidamente en las filas del mundo de la música, acumulando más de un millón de reproducciones en varias plataformas. Reconocido por sus excepcionales habilidades compositivas, Calder Allen es uno de los talentos más prometedores del género. El enfoque de Calder a la hora de escribir canciones es reflexivo y deliberado. Su objetivo es infundir en su música honestidad, pureza y un reflejo de sus creencias y experiencias personales. Entre ellas, su profundo amor por la naturaleza. En su web muestra su apoyo a varias asociaciones conservacionistas.

«Sólo quiero crear con intención. Quiero que mis canciones sean puras, honestas y representativas de quién soy, lo que creo y lo que imagino para el mundo».

Desde el eco conmovedor de los órganos y pianos que configuran la escena, hasta el cálido gemido de un violín en temas más oscuros y el sorprendente uso de baterías electrónicas y de baja fidelidad que complementan la voz profunda y ronca de Calder, “Dreamers, Drifters, and Hiders” no es un disco fácil, pero sí una clase magistral llena de recovecos. El álbum siempre mantiene una profundidad lírica impresionante, pintando un paisaje sonoro que es a la vez sombrío y melancólico, country gótico perfectamente conducido por Sexton y que por momentos puede recordar las últimas aventuras de Bob Dylan (salvando las distancias).

La primera vez que Allen estuvo en un estudio de grabación fue en Arlyn Studios. Su abuelo, Terry Allen, grababa su álbum “Moby Dick”, producido por Sexton. Charlie se convirtió en una parte fundamental de la incipiente carrera de Allen, produciendo sus dos primeros álbumes. Con un sonido aún mejor que en su debut, Allen demuestra su versatilidad sonora en cada melodía, mostrando que lo tiene todo para ser uno de los artistas fundamentales de Texas para la próxima generación.

Allen presentó el nuevo disco con un show especial en su ciudad natal en 3Ten Austin City Limits. A partir de esta semana saldrá de gira de telonero de Charles Wesley Godwin, luego seguirá con Miranda Lambert,  Red Clay Strays y Cody Jinks. Con nombres así, seguro que se hace un hueco en la industria.

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