Antonio Hernando: Entrevista con Nick Jameson, de “The American Dream” (1970)

Te pongo en situación, con algo que seguro te ha pasado en más de una ocasión: un amigo/a te recomienda un disco, un álbum en vinilo (en mi caso el escritor Álvaro Alonso, con impecables libros en su currículum sobre Townes Van Zandt o Gene Clark) y de repente ese artefacto sonoro se convierte en tu nueva banda sonora, y la ilusión por la música y las canciones se reaviva como nunca. Ver girar en el plato ese disco una vez comprado en el mercado de segunda mano, sentir una nueva joya en tu colección y saber que se convertirá como tantas otras en ya parte de tu vida. Pues esto mismo me pasó a mí como otras muchas veces con el único álbum que publicaron en 1970 la banda de Filadelfia The American Dream, que además se convertiría en la primera producción oficial del gigante Todd Rundgren (luego a los mandos de obras maestras de New York Dolls, Patti Smith o Cheap Trick). Un grupo que llegó a tocar en su ciudad natal con coetáneos como Muddy Waters, Cream, The Byrds, Jeff Beck, Ten Years After, The Who o Grand Funk Railroad, y pasando la difícil prueba con más de un notable alto. Aquel quinteto estaba formado por Don Lee Van Winkle a la guitarra y coros, Nick Jameson a la guitarra solista, piano y coros, Nicky Indelicato a la voz (y guitarra rítmica), Don Ferris al bajo y coros y Mickey Brook a la batería. Una alineación de lujo, pero quitando los datos remitidos hasta aquí (la mayoría recogida en los créditos del propio vinilo), la información en internet (aunque parezca imposible) era prácticamente inexistente. Y eso que el sello catalán Guerssen Records publicaba hace poco “1969 Todd Rundgren Demos” un brutal vinilo en donde se incluían las maquetas de The American Dream grabadas con su productor antes de editar su único álbum de 1970, así como un par de futuros temas destinados a un fallido segundo disco; y sí, algo más de información gracias a las notas interiores del álbum. Pero claro, mi obsesión por aquellas 12 canciones seguía palpitando como nunca (y más con estos nuevos hallazgos), y me seguían faltando datos que aliviaran mi sed por ellas, así que con mucho tiempo y mimo, fui investigando y tirando del hilo mediante páginas y enlaces con todo lo que tuviera que ver con la banda.

El primero que aparecía y del que salía más información era Nick Jameson, el compositor principal en The American Dream. Gracias a una entrevista (y algún dato en Wikipedia), pude saber que incluso trabajó en los estudios de Albert Grossman (célebre mánager de Bob Dylan, The Band o Janis Joplin), para entrar posteriormente en la mítica banda Foghat como bajista (pero también como productor de sus discos) durante 1975 y 1976, abandonando en 1977 para publicar su primer álbum en solitario, Already Free, tras haber acompañado brevísimamente también a la Paul Butterfield Blues Band. Lo curioso es que tras este primer álbum en solitario de 1977, no volvería a lanzar otro álbum hasta 1986, un segundo disco en solitario llamado “A Crowd of One”, y hasta el momento el último. ¿Pero por qué? Pues porque Nick Jameson cambió la música por el cine y la televisión, apareciendo como actor por ejemplo en la serie 24 durante tres temporadas como el presidente ruso Yuri Suranov, y sobre todo, como actor de doblaje en películas y series de animación, como “Las Guerras Clon” del universo Star Wars. Pero es que tras varios años viviendo en Los Ángeles, en 2014 decidió mudarse nada menos que a Reykjavik, la capital de Islandia, en donde (ojo), se dedica a la comedia como monologuista y cómo no, músico ocasional. Pues bien, lo segundo que descubrí animado por mis primeras averiguaciones sobre la banda, es que tristemente todos los miembros de The American Dream a excepción de Nick Jameson habían fallecido, incluido Don Lee Van Winkle, quien para mi frustración lo había hecho tan sólo un par de meses antes de empezar a buscar información sobre ellos, concretamente el 28 de febrero de este 2024 por un cáncer de hígado, y eso que Winkle había conseguido finalmente en 1999 lanzar su primer álbum en solitario, “Fallin Idol” . Pero la reciente muerte de su esposa y el suicidio de su hijo, el talentoso rapero Major Van Winkle, seguramente aceleró su salida de este mundo. 

Precisamente como homenaje a Don Lee Van Winkle tras su prematura muerte, un ejército de músicos y amigos decidieron honrar su legado con un emotivo concierto en Filadelfia el pasado 16 de junio y cómo no, su amigo Nick Jameson, único superviviente ya de The american Dream, se presentó en Philadelphia desde Islandia, e incluso volvió a recrear la mítica portada de su álbum, aquel célebre disparo con aquellos cinco jóvenes sonrientes en la Plaza de la Independencia de su ciudad casi medio siglo antes, una emotiva foto que también compartiría en sus redes sociales. Y en mitad de todo esto, le debió llegar un mensaje de un tarado desde España con un programa de radio, y que sí, también tenía sus propias canciones, pero que era más fan y mitómano que músico. Y tras varias conversaciones, y en un proceso de disfrute extremo y sensación de privilegio en cada respuesta, conseguí aquello que anhelaba desde la primera vez que bajé la aguja a aquel vinilo: saber, y de primera mano por Nick Jameson, los inicios de la banda, el porqué de su disolución, y por si fuera poco, la historia detrás de las 12 canciones del álbum. Y como esa información es tan valiosa como necesaria, y yo quiero reivindicar el legado de Van Winkle, Jameson y los demás, aunque he publicado un podcast especial tanto en mi programa de radio La Hora de la Aguja (disponible en iVoox) como en el programa Elepé para Let’s Rock Radio (disponible en iVoox y Spotify), gracias a Dirty Rock, os puedo traer aquella entrevista en formato de revista. Espero que la disfrutéis tanto como yo lo hice durante todo este mágico proceso. Gracias por haber llegado hasta aquí, ahora toca disfrutar del viaje.

ANTONIO HERNANDO: Nick, no hay palabras de agradecimiento para un honor de este calibre. Por favor, cuéntanos el origen de The American Dream: cómo os conocisteis, cómo entró Todd Rundgren como productor en el disco, como fueron aquellos primeros conciertos…

NICK JAMESON: La verdad es que The American Dream comenzaron como The Great American Dream, había un tipo llamado Pat Kush tocando la guitarra eléctrica, más tarde se fue para montar una banda llamada The Insex, y yo les produciría una canción de hecho más adelante, muchos años después. Cuando Pat se fue, ellos necesitaban a un guitarrista, y Don (su bajista), y un tipo llamado Joan Debaptiste que era un amigo de la banda, estaban sentados en un restaurante, en Filadelfia, y me vieron caminando por la calle, y Joan me conocía porque yo había estado tocando mucho por la ciudad, por lo que Joan le dijo a Don “ahí tienes a tu guitarrista”. Así que me invitaron a sentarme con ellos y me hablaron sobre la banda y me invitaron a entrar en ella, citándome para un ensayo en un par de días. Así que llevé mi guitarra hasta el noreste de Philly y conocí a los chicos. El noreste de Filadelfia es un barrio totalmente de clase obrera, es como un suburbio, y desde allí tomábamos la famosa Filadelfia con L, la Frankord El, que de hecho se convirtió en una de nuestras canciones (risas). Frankford El es muy famosa, así que como decía fui desde Frankford El hasta donde estaban los chicos y les conocí, y pensé que eran maravillosos. Disfruté mucho tocando con ellos, y cuando volvía a casa pensaba “estos tíos son los tipos más guays que he conocido nunca, estos tíos son absolutamente fabulosos, sencillamente geniales”, lo pensaba todo el tiempo. Bueno, la razón de eso es que aquellos tipos estaban tomando pequeñas pastillas de speed, y me dieron una, y yo jamás había tomado de aquello, no sabía nada del tema, así que todos estábamos colocados y era como “uh, esto es lo mejor del mundo, oh, vamos a ser muy grandes” (risas). Así que decidimos que necesitábamos a un cantante principal, o realmente no sé quién decidió aquello, sólo sé que yo conocía a un tipo llamado Richard Johnson, que era un cantante negro de blues básicamente, y le dije que si quería venir un día y conocer a los chicos. Así hicimos, Richard vino y a todos le gustó, así que esa fue la formación de la banda durante un tiempo. Éramos Don Lee Van Winkle, Mickey Brooks, Don Ferris, yo y Richard Johnson. Y un tiempo después Richard Johnson pensó que aquel no era su rollo, él era un tipo de blues y nosotros sobre todo de rock, hacíamos algunas canciones de blues, pero aquel no era del todo el rollo que él quería hacer. Así que empezamos a buscar a otro cantante, y todos los chicos de la banda conocían a Nicky Indelicato, así que se unió a la banda. Al principio pensábamos que era el típico macarra, iba un poco de esa onda de malote, se vestía de esa guisa… en el escenario saltaba y no paraba quieto, pero finalmente mutó a un frontman más estático, más rock and roll. Y empezamos a tocar por toda Filadelfia y nos hicimos bastante famosos. Tocamos en sitios como el Drama, The Second Fred, y muy especialmente en The Electric Factory, que era el club más grande de la ciudad. Y acabamos de forma muy regular allí, éramos de alguna manera la banda de la casa, y abrimos para casi todas las grandes bandas de los sesenta, sin contar los Beatles o los Stones (risas). Creo que tampoco abrimos para Hendrix, pero abrimos para cualquier otra banda que venía a la ciudad, nos llamaban muchísimo entonces. Y esto pasó como en un par de años y entonces llegó Todd Rundgren, otro nativo de Filadelfia, que estaba por allí. Él estaba entonces en una banda originalmente llamada Woody’s Truck Stop, de la que se fue para hacer su proyecto y juntó a otros músicos para montar The Nazz, y durante la grabación de su primer álbum él ya demostraba que quería ser productor. Quería crear un sonido en la banda que el productor de entonces no estaba consiguiendo, así que empezó a aprender sobre eso, aprendió sobre sonido y produjo el segundo álbum de Nazz (que era realmente genial), y entonces decidió que nos quería producir a nosotros, convenciéndonos de que nos había llegado ya el momento para que sacáramos un álbum.

Entrevista con Nick Jameson “The American Dream” (1970) interview

Ya sabes, éramos buenos amigos, y Todd conocía a nuestro mánager, Paul Fishkin, que acabaría siendo el director de la discográfica Bearsville Records. En esa época no era Bearsville Records, se llamaba Ampex Records, y su dueño era Albert Grossman, notorio mánager de The Band, Bob Dylan, Janis Joplin, Ritchie Havens, Peter Paul and Mary y muchos otros. Así que nos reunimos y estuvimos de acuerdo en grabar un disco para Ampex Records, por lo que nos fuimos a Nueva York y grabamos un buen número de demos y maquetas, y entonces firmamos con Albert y las grabamos. Y bueno, funcionaron bien a nivel local. El disco se distribuyó a nivel nacional con algo de repercusión, pero no mucha. Giramos un poco, pero no demasiado lejos, ya que de alguna manera seguíamos siendo un fenómeno local, pero bueno, el álbum tuvo muy buenas críticas y artículos extensos en algunos periódicos. A lo largo de los años, ciertas cosas han hecho que “Frankford El” sea considerado de alguna manera un clásico y la canción “I Ain’t Searching” sea también otra favorita en general. Pero bueno, continuamos durante un tiempo, nos estábamos preparando para grabar un segundo álbum, yo incluso construí un estudio de grabación en nuestro local de ensayo en Third and Cherry en Filadelfia, con una grabadora analógica de dos pistas, y grabamos algunas maquetas allí, que acabarían en Sigma Sound Studios. Luego fuimos a otro estudio en Filadelfia y grabamos algunas demos más, pero en ese punto, decidí que quería centrarme en la producción de álbumes, en el sonido, quería expandirme en la música un poco más, así que decidí que quería seguir por libre, y me fui de la banda. Creo que ellos simplemente… creo que Nicky había dejado la banda antes, no sé, teníamos bastantes discrepancias. No recuerdo los detalles, pero él se fue y nosotros cuatro continuamos durante un año aproximadamente. Éramos buenos, una banda en forma, engrasada, con Winkle y yo ocupándonos de las voces. Pero me fui, y me mudé a Woodstock, en Nueva York. Bueno, Bethel, Nueva York realmente, que es como una parte de Woodstock, y comencé a trabajar allí como ingeniero de sonido y ocasionalmente productor, y ese fue el principio del fin de The American Dream. Pero como ya dije, en Filadelfia seguíamos presentes, hicimos hace poco el concierto en memoria de Don Lee Van Winkle, y todos estos recuerdos volvieron a mi mente… fue una época genial. Por ejemplo, mi canción, “I Ain’t Searching”, la grabé de nuevo en mi primer disco, y luego Eric Bazilian de los Hooters la grabó para el proyecto de David Uosikkinen, “In the Pocket: Essential Songs of Philadelphia”, donde sale mucha gente genial. Eric y Dave son de la banda The Hooters, que fue una banda enorme en América en los ochenta y ahora son bastante famosos en Europa. ¿Y sabes una cosa? Cada vez que voy a Philly, (a Filadelfia), veo a gente que aún me dice, “hey tío, adoro a tu banda”. De alguna manera somos legendarios allí, incluso sin haber sido famosos nacionalmente. Pero los buenos tiempos han sobrevivido.

AH: Qué maravilla, Nick. Pues venga, vamos a desglosar una por una las canciones del álbum. El disco arranca con “Good News”, mejor comienzo imposible…

NJ: Sí, el disco comienza con una llamada de teléfono entre Nicky Indelicato y su abuela. Nicky era un tipo muy gracioso, siempre nos estaba contando historias de su infancia, y una de ellas era la de que su abuela le solía llamar “monkey fish” (“pez mono”). Le decía, “you god damn monkey fish, your mama should have a pig, a pig you can eat, can eat you” (“tú maldito pez mono, tu madre debería tener un cerdo, un cerdo que te pudieras comer, que te pudiera comer a ti”), y nosotros pensábamos que aquellas rimas eran demasiado graciosas, así que Nicky la llamó por teléfono y le pidió que le soltara de nuevo todo aquello, y comenzamos la canción con eso, lo pusimos como intro, y es de alguna manera divertido tener una canción que se llame “Good News” (“Buenas Noticias”), con tu abuela gritándote al oído, justo en los primeros compases.  Creo que el tema fue principalmente compuesto por Don Van Winkle, tengo algunos recuerdos un poco vagos ya de todo aquello, pero creo que él trajo prácticamente toda la idea y ya la terminamos entre todos. Creo que es una canción interesante, con una estructura inusual, no con el típico estándar estrofa-puente-estribillo.

AH: El álbum continúa con “Big Brother”, que gracias a la edición de vuestras maquetas en vinilo por Guerssen Records, pude escuchar en una versión anterior a The American Dream, en un proyecto tuyo previo llamado The Finestuff.

NJ: Sí, “Big Brother” (“Gran Hermano”) es una canción que había escrito algunos años antes de unirme a The American Dream (realmente una de las primeras canciones que escribí en mi vida), y estaba basada de alguna manera en el concepto de “Gran Hermano” de George Orwell en su novela “1984”. La grabé primero con The Finestuff, con los arreglos prácticamente iguales en realidad, y luego la grabaría con The American Dream.

AH: Tercer corte, y uno no deja de preguntarse en qué momento bajará el listón, porque “The Other Side” es otra preciosidad…

NJ: Sí, esta era una canción Don Lee Van Winkle, una especie de balada utópica muy típica de Winkle. No te sé decir en realidad cómo ni cuándo vino con ella al local, pero sí que fue una de las primeras canciones que escribió para la banda.

AH: “Credemphels”, la cuarta canción del álbum, te obliga a mover los pies con ese acorde a lo Hendrix, aunque no entendamos mucho la letra…

NJ: Totalmente. “Credemphels” es otra de esas ocurrencias de Nicky Indelicato. Nicky estaba siempre creando frases raras y palabras sin sentido y básicamente tenía su propio idioma, y “Credemphels era simplemente una palabra sin significado, que puedes sustituir por prácticamente casi todo: “oh, tengo hambre, vayamos a un restaurante a tomar unos credemphels”, o lo que sea… Algo interesante que era novedoso para nosotros es que hay una sección de vientos que consiste en todas nuestras voces cantando “pá-ra-rá”, “pá-ra-rá”, y esto se nos ocurrió porque Todd Rungren nos llevó a una fiesta en Nueva York, en el Record Plant, (los famosos estudios), y había una banda tocando con vientos que en cada una de las canciones que interpretaban usaba el mismo arreglo: “pá-ra-rá”, “pá-ra-rá”. Así que nosotros simplemente deambulábamos por la fiesta cantando entre nosotros “pá-ra-rá”, “pá-ra-rá” y finalmente metimos eso en la canción. La canción ya era lo suficientemente tonta con un título como aquel, así que, ¿por qué no hacerlo? No puedo recordar realmente cuántos de nosotros estuvimos involucrados en la letra de la canción basada en aquella ocurrencia de Nicky, pero sinceramente no creo que signifique nada (risas). Eran cosas de Nicky, versos de su propio idioma. Era evidentemente la canción más tontorrona del álbum.

AH: A continuación viene “Storm”, que es una de mis favoritas.

NJ: Ah, “Storm”. Creo que la escribí en los primeros días con The American Dream. Es una canción bastante directa, una de las pocas en la que usamos piano. Toqué el piano eléctrico en ella.

AH: Y la cara A cierra con “Cadillac”, con la que siempre pierdo la cabeza. Nick, esta la voy a grabar en algún disco, te aviso. O mínimo para los conciertos, porque es pura adrenalina.

NJ: “Cadillac” es un pequeño rocanrol escrito por mí, la verdad es que no tengo mucho más que decir, simplemente que es una canción de rock y coches (risas).

AH: Pues aún noqueados por la cara A, de repente la cara B arranca con “My Babe”, la única versión del álbum…

NJ: Escuché “My Babe” por primera vez tocada por The Holla Balloons, que era una banda de los sesenta. Tuvieron varios hits con canciones de Buddy Holly a principios de esa década, durante la Invasión Británica, y luego se desvanecieron. Todos llevaban el pelo largo y teñido de rubio, eran una especie de banda de la que todos al final se olvidan, pero cuando yo estaba viviendo en Atenas (Grecia) cuando tenía 14 años, los Holla Balloons vinieron a tocar como banda residente al Athens Shelton. Tocaban en el club en la parte de arriba, así que por supuesto todos fuimos a verles, y tenían a un nuevo guitarrista llamado Mick Wayne, que fue una de mis primeras influencias a la guitarra (y todavía hoy sigo escuchándole mucho, es un guitarrista excepcional). El caso es que la banda había cambiado totalmente gracias a Mick, eran mucho más roqueros, mucho más originales, y una de las canciones que hicieron fue “My babe”. Creo recordar que “My Babe” fue grabada originalmente por The Righteous Brothers, (no me acuerdo del año), y entonces comencé a tocar “My Babe” con mi banda en Grecia, nos llamábamos The Zoo (nota del autor: efectivamente en 1966 Nick Jameson publicaría hasta 4 singles de 7 pulgadas con la banda The Zoo, uno de los primeros grupos de garage surgidos en Atenas). Luego escuché más versiones de la canción, especialmente me impactó la de la Spencer Davis Group, (oh, tío, nadie canta mejor que Steve Winwood) y literalmente he ido tocándola en prácticamente todas las bandas por las que he pasado: con The American Dream, con Foghat… aún la sigo tocando cada vez que me junto con más músicos. Es atemporal, es una canción eterna.

AH: La verdad es que la versión de Foghat es también tremenda, siempre me encantó ese disco, “Fool For the City” (1975), en donde no sólo eres el bajista, sino que también lo produces. Pero hablando de versiones, ahora llega uno de tus temas fetiche, “I Ain’t Searching”, que luego incluiste también en tu primer álbum en solitario, precisamente tras tu aventura en Foghat.

NJ: Ah, recuerdo escribir esa canción. Habíamos estado jugando al softball (una especie de béisbol), con una banda llamada It’s a Beautiful Day, que llevaban unos pelos larguísimos (risas), y habíamos estado bebiendo cerveza, y colocándonos un poco, y llegué a casa y la canción simplemente me llegó, surgió. Recuerdo que en aquel momento de inspiración estaba influenciado por Crosby, Stills and Nash… ah no, espera, era Buffalo Springfield, una canción llamada “Questions”, de Stephen stills, y que va de un acorde mayor a un acorde de quinta menor en el estribillo (bueno, en la estrofa en su caso, de un Mi mayor a un Re menor), y esto fue creo la única influencia que puedo recordar (risas), todo lo demás surgió solo. Aquella canción fue el single del disco y cuando la grabé de nuevo para mi álbum en solitario fue también el single en aquella ocasión. En cualquier caso, es un buen tema, estoy bastante orgulloso de él, tiene dos solos de guitarra, el primero lo hizo Don Lee Van Winkle a la guitarra acústica (o eléctrica en limpio, ya no me acuerdo), y luego aparecía yo con un solo a lo Neil Young, con mucho fuzz (distorsión), y básicamente usé los mismos arreglos cuando la grabé para mi disco. Por cierto, me encantó cómo la cantó Eric Bazilian de los Hooters, al límite de su rango vocal, rajándose la voz, creo que lo hizo genial… puede verse en el documental “In the Pocket” de 2014.

AH: Entrando en la recta final, viene la sugerente “Future’s Folly”, que en su versión en demo ya estaba prácticamente acabada.

NJ: Sí, “Future’s Folly” era una canción de Winkle. Tenía un ritmo muy juguetón, un groove muy shuffle, era rítmicamente y musicalmente una canción interesante, una de las más bonitas del álbum.

AH: Pero el disco sigue con otra canción tuya, “I Am You”, una balada deliciosa.

NJ: Cierto, toqué el piano en esta también. Se me ocurrió cuando un amigo mío en esa época, Gavin Andy Grab, (que falleció poco después, tristemente), dijo “I am you” (“yo soy tú”), o leyó la frase en algún sitio y ya sabes, era una especie de frase hippie espiritual. “Yo soy tu, tío”, así que bueno, la usé para esta canción.

AH: En la siguiente se os escucha reíros y disfrutar, y eso se contagia, “Frankford El”. Además, por lo que me contabas casi que se ha convertido en la canción más famosa de la banda.

NJ: Tengo el recuerdo de que un día, cuando estaba escribiendo “Frakford El” con nuestro primer cantante, Richard Johnson, no sé de dónde me vino el verso “you can’t get the heaven on the the Frankford El, because Frakford El goes straight to hell” (“no puedes llegar al cielo en Frankford El, porque Frankford El va directo al infierno”), cambiamos eso por “because Frankford El goes straight to Frankfurt (“porque Frankford El va directo a Frankfurt”). Ya sabes, la sensibilidad era más delicada en aquellos tiempos. Lo que fue muy divertido fue vernos a todos gritando, chillando y coreando aquello, como bien dices.

AH: Y así hemos llegado al final del álbum, “Raspberries”, el tema más largo del disco, pero a mí me encanta como broche…

NJ: No tengo ni idea de dónde vino aquella canción. El hecho de que se llame “Raspberries” (“Frambuesas”), estoy seguro de que tuvo que ver con Nicky Indelicato de nuevo, otra de sus disparatadas palabrejas (risas). Creo que estábamos tocando en el local, a mí se me ocurrió el riff principal de guitarra y probablemente él empezó a cantar “raspberries”, o algo por el estilo, algo en la onda de temas como “Da Doo Ron Ron”, la canción de Phil Spector (risas). Creo que la empecé a escribir yo, y la terminamos entre todos. Fue una especie de colaboración, especialmente en la parte lenta de la canción.

AH: Y se acaba el disco, y con ese buen sabor de boca y ganas de más, es inevitable preguntarse por qué os separasteis. Es un tema que ya rondaste en la primera pregunta, no sé si es incómodo… pero una banda que tenía ecos de Moby Grape, los Beatles, Big Star… uno se plantea si quizás si hubierais seguido el tiempo os hubiera dado el reconocimiento que os merecíais.

NJ: No me resulta incómodo hablar de cómo nos separamos, porque básicamente se debió a mí. Yo lo dejé para hacer otras cosas, y los chicos no continuaron juntos, aunque hemos tenido muchas reuniones de nuevo a lo largo de los años. Muchas, muchas reuniones. Creo que la más reciente fue a finales de los noventa, The Electric Factory celebraba algún tipo de fiesta o alguna fiesta de aniversario o algo así y nos juntamos de nuevo, en nuestro escenario favorito.

AH: Nick, infinitas gracias por el rigor, la honestidad y la exhaustividad en tus respuestas. Sólo espero que la gente pinche vuestro disco en cuanto lea u oiga esta entrevista (nota del autor: tanto el álbum de estudio como las maquetas editadas por Guerssen pueden escucharse por Spotify o YouTube, entre muchas otras plataformas digitales).

NJ: Gracias a ti, Antonio. Ha sido un placer.

Y recuerda que puedes escuchar esta entrevista en podcast en los siguientes links de ivoox y spotify:

Bandcamp de Antonio Hernando: https://antoniohernando.bandcamp.com/

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