Segundo trabajo de Willow Avalon este «Southern Belle Raisin’ Hell», lanzado hace una semana donde a lo largo de estas catorce canciones, Avalon honra sin esfuerzo a quienes la precedieron, al mismo tiempo que agrega su perspectiva muy necesaria al género.
Willow Avalon, originaria de la zona rural de Georgia, encapsuló en su debut el año pasado con «Stranger» toda la esencia de un alma vieja. Dejando su casa a los 15 años para perseguir sus sueños musicales y narrativos, la artista veinteañera.
«Southern Belle Raisin’ Hell» suena, por un lado, como un álbum de country pop contemporáneo, pero también como un álbum country setentero. Willow Martin, es hija del idiosincrásico músico Jim White, por lo que conoció la música a una edad temprana, aunque su talento musical floreció principalmente en el coro de la iglesia local.
Creció en una zona rural de Georgia, pero dejó el inestable hogar paterno a la edad de 15 años para finalmente buscar fortuna en Los Angeles. Han pasado más de diez años y Willow Avalon parece haber encontrado su felicidad en la música.
Willow Avalon, influenciada por la música country que se hacía en los años 60 y 70 por cantantes como Dolly Parton, Tammy Wynette, Loretta Lynn y Lynn Anderson, nos recuerda a los grandes cantantes de country de esos años pero musicalmente inyectado de pop del presente. Por lo tanto, Southern Belle Raisin’ Hell está más cerca de Sierra Ferrell que de Kacey Musgraves.