The Crunch y su concierto en el 16 Toneladas de Valencia

Viernes de puente de pascua en una Valencia ciudad medio desierta. En la sala 16 Toneladas bolo de The Crunch, banda reciente y poco conocida, pero de esas que se conoce comúnmente como “supergrupo”, osea un combo formado por glorias musicales veteranas y famosas reunidas en un conjunto de forma ocasional.

Supergrupo en este caso del punk-rock inglés del 77, pasado por conexión sueca. Las entradas, un pelín caras, (bueno, señoras/es, no estamos ante un grupillo de principiantes veinteañeros ni ante una banda local) quizá pudo echar atrás a algún indeciso. De todas formas la cosa prometía bolazo, oportunidad única,… sobretodo a los que conociamos al grupo o nos gusta el buen punk-rock. En total serian algo más de 100 personas. El público, madurito, de 35-40 años para arriba. Pero vamos al asunto.

La banda se hizo esperar un poco pero a las 23’30 aprox. salian al escenario. La formación, de lujo, la conocida por todos, pura conexión Estocolmo-Londres: Sören “Sulo” Karlsson, imponente y carismático músico de rock sueco, líder de The Diamond Dogs, a la voz y a la guitarra rítmica, dirigiendo; le seguía una mujer, la teclista y cantante, la tambien sueca, Iddle Schultz (del grupo escandinavo Docenterna) y un trio glorioso de escuderos míticos del punk UK del 77 curtido en mil batallas formado por Dave Tregunna (bajo y coros, de Sham 69 y The Lords of the New Church), Mick Geggus (guitarra solista y coros, de The Cockney Rejects) y Terry Chimes (batería, y ex de The Clash). Empezaron uno a uno a tocar los temas de sus dos discos publicados, Busy making noise y el nuevo del que estrenaban algunos temas.

El sonido, estupendo, el estilo, como el de sus discos: una mezcla de powerpop-rock-punk, maduro, elegante y melódico. Un estilo que une con gusto y sabiduría el rock clásico de Sulo de los Diamond Dogs con el recuerdo del punk combativo y callejero de todas las bandas por las que habian militado parte de sus músicos y que en general recuerda mucho al de Mike Ness en los Social Distortion más pegadizos y menos acelerados.

Al principio el público asistente se mostró un tanto frio, lógicamente, al desconocer la mayoría los temas. A los 4 canciones, tras la primera versión, el Russian roulette (de los Lords of the New Church, dedicada lógicamente a Stiv Bators), reconocida por todos, el ambiente se caldeó con rapidez y la gente se empezó a entusiasmar. Despues caerian otras versiones de temas míticos de todas sus bandas de origen: el Bad man de los Cockney Rejects, el Borstal breakout de los Sham 69, el Janie Jones de los Clash, todas tocadas con savoir faire y sobredosis de estilo. Hubo momentos delicados, la balada Yesterday’s boys and girls, y la canción A little bit of grace, cantada a duo entre Sulo y Iddle Schulz, medios tiempos, A matter of time, puro Clash, algun tema nuevo. Neon Madonna, que se mezclaban con arranques punkrockeros rápidos y efectivos como Street flavour o Gangster radio.

Despues de hora y pico de bolo, el grupo dejaba el escenario por segunda vez despues de los bises, con el personal, enfervorecido, pidiendo más y más. Ojalá vuelvan por aquí. Además de buena gente son un grupazo, míticos.

Texto de Manel Ramodne y fotos de Juan Carlos Pestano, litelestudio fotografía.

concierto the crunch

 

More from Equipo de redacción de Dirty Rock Magazine

The Max Meser Group. Especial Purple Weekend

The Max Meser Group actuó en el Espacio Vías, dentro de la...
Leer Más