Dice Love of Lesbian en “el manifiesto delirista” : – “Qué suerte que aún hay gente que lo hace fácil, aquellos que consiguen que fluya bien……”
La organización del festival Sonidos Líquidos en Lanzarote forma parte de esta gente. 3000 personas, sold out, todo bien organizado, vino y cervezas a 2 euros, baños adecuados y en un marco incomparable, al que tenías muchas facilidades para llegar en guaguas.
Buen sonido general, y puntualidad y todo fluye.
Comenzó en el nunca mejor dicho escenario utópico del aparcamiento de Bodegas La Geria, entre volcanes y viñedos. 9 horas de Música alternativa, desde las 16.30.
No pude ver a el soul de los grancanarios Banadú, llegué justo con Cumbia Ebria banda local que nos cautivó con una versión de “un día en Texas” de Parálisis Permanente, mucho sentido del humor, ilusión y ganas para comenzar. Destacaría sus temas “Tírate” o “Baila conmigo”. Buen comienzo.
A destacar al bueno de Job Ledesma “Juana la Cubana” amenizando los intermedios entre grupos, donde los técnicos de sonido hacen sus función y rediseñan el escenario, con su maestría a los platos.
Y llegó Kitty, Daisy & Lewis.
Uno ve a los inclasificables hermanos Durham, a su padre a la guitarra y a su madre al contrabajo, en el escenario y cree que en vez de Gran Bretaña vienen de Tennessee. Los jóvenes cambiando de voces e instrumentos como si fuese usual la cosa. Una maravilla sonora.
Su música, letras, producción, estética, pose y actitud frente al mundo son de los años 50. Sin una grieta, sin nada que les pudiera delatar del siglo XXI, ni un guiño a la electrónica.
Destacaría “Don’t make a fool out of me” que empezó a levantar al personal e ir advirtiéndonos del nivel y cariz que estaba tomando el evento. No sé si es Rockabilly, R&B, Swing, Country, Blues, o Rock and Roll pero podría estar horas escuchándolos.
Y después la “Gloria” con León Benavente.
Están en un momento colosal en directo, energía y contundencia que dejo anonadado al público presente. ¡Abraham esta que lo peta! Nos llevó a “California” a “la ribera” a la “habitación 615”.
León Benavente nos deleitó con dos temas nuevos de su reciente EP “Maestros antiguos” y “Se mueve”, y nos acercó al éxtasis final con “Ser brigada” con Boba por encima del publico Y con la aclamación del personal. ¡Muy Grandes!
Para casi terminar llegó el cabeza de cartel Love of Lesbian con un show entrañable, pequeños problemillas de sonido en las 2 primeras canciones que fueron subsanados, donde nos mostraron su ascenso en los escenarios, y su subida de nivel a una banda grande, con mucha personalidad y tablas, que no ha perdido ni la cercanía con su público, ni la humildad.
Apoyándose principalmente en su ultimo disco “el Poeta Halley” sin olvidar temones de otros disco como “Algunas Plantas”, “John Boy” o “Alli donde soliamos gritar”. En especial fue “Bajo el Volcan”, que aunque inspirada en Islandia vino que ni pintada con el entorno. “Quiero planear sobre tu tierra estable. Quisiera regresar a ser viento suave”. Y como no la enérgica y positiva “manifiesto delirista” mi preferida, una inyección de buen rollo, que se convierte en placer al disfrutarla en colectivo.
Y de nuevo Job nos preparaba en sus muchas vertientes como Dj para la explosión electrónica final con Serial Killerz y su locura, y la fiesta.
Un festival, Sonidos Líquidos, que está de puta madre, buena organización, buen sonido, en un enclave utopico y maravilloso “Como estar en la luna” decía Balmes. Qué mas se puede pedir. Totalmente recomendable y para repetir. Las cosas hechas con ganas y buen gusto se notan.
Gracias por este disfrute musical inolvidable.
Fotos y vídeos: José Fradejas.
