La promotora Holy Cuervo, hizo que Nebula incluyesen Madrid en su gira de presentación de su último trabajo, “Holy Shit”; grabado 10 años después del anterior. Con ganas de volver a verlos después de su actuación en el ARF2018, nos dirigimos a la Sala Caracol. La verdad es que su show en el Azkena me enganchó y me retuvo en ese tercer escenario, de hecho todavía conservo un buen recuerdo del mismo y de ese ambiente hipnótico que crean en sus actuaciones.
Una vez dentro me sorprendió la escasa entrada en la Caracol, apenas la mitad del aforo. Extraño el poco tirón que tiene esta banda en Madrid (y no es la primera vez) siendo una de las bandas de referencia del sonido Stoner y creada a partir de una escisión de los míticos Fu Manchu. Honestamente no creo que fuese por la coincidencia con Pixies. Tal vez el concierto de Gluecifer del día siguiente o posiblemente el anuncio sorpresa del concierto que Green Day dará la próxima semana, hicieran desistir a fans que tenían pensado acercarse el mismo día del concierto, una lástima.
A las 22 horas salieron al escenario Eddie Glass, Ranch ( Miguel Sironi ) sustituyendo a Tom Davies y Michael Amster. Ofrecieron un show de hora y media, en el que interpretaron 4 temas del nuevo disco entremezclados con clásicos de la banda como, “Do it Now”, “Aphrodite”, “Let it Burn” o “Atomic Ritual” tema que usaron para cerrar el bis y el concierto . Pudimos disfrutar de ese sonido que caracteriza al grupo; guitarras duras con mucho Fuzz y Wah-wah; riffs a lo Black Sabbath y ese toque cósmico y psicodélico que te hipnotiza. También hubo sitio para temas como “Giant” y “Clearlight”, más cercanas al estilo de Fu Manchu y que; hacen que al escucharlas quieras coger un “Powell Peralta” y tirarte a la calle a hacer “Free ride” , emulando al mítico Tony Hawk.
En general buen concierto sin adornos ni efectos escénicos, la banda su equipo y nada más. Muy bien Eddie a la guitarra aunque flojo en la voz, se noto menos poderosa, tal vez por la cantidad de conciertos realizados este año. Tremendo el batería, el mejor de los tres, potente y sin bajar el nivel de la pegada en ningún momento; movió incansable a la banda y el público al son de sus ritmos.
El sonido malo….muy comprimido y limitado, dando la sensación de no estar sonando a la potencia que debería sonar Nebula. No puede ser que en primera fila suenen como si estuvieses al fondo de la sala, deberían doler los oídos y no fue el caso. Incluso cuando Eddie hizo algún comentario en alguno de los descansos apenas se le oía en primera fila.
Fue un comentario general e incluso algunos habituales comentaron que lo mismo había pasado en conciertos anteriores. Espero que no hayan obligado a la sala a limitar el volumen de los conciertos y lo solucionen para eventos venideros.
Eso si, no fue impedimento para que los más jóvenes se entregaran a frenéticos pogos en las primeras filas. Una alegría ver bastante gente de entre 20-30 años entre el público.
Seguiremos rockeando y contándolo desde Dirty Rock, saludos a todos
Setlist:
“To the Center”; “Do it Now”; “Mans Best Friend”; “Messiah”; “Giant/Clearlight”; “Aphrodite”; “Freedom”; “Full Throttle”; Tomorrow Never Comes”; “Witching Hour”; “Fall of Icarus”; “Anything from You”; “Down the Highway”; “All the Way”; “Out of Your Head”; “Let it Burn”; “Sonic Titan”; Atomic Ritual”.
Redacción: Luis Quirós. Fotografía: Paula Rodríguez
