Chris Isaak – San Francisco Days (1993)

chris isaak san francisco days disco review

Chris Isaak es un grande y además auténtico. Imparable en este disco donde la madurez del croony contemporáneo más infalible quedó bien retratada en «los días de San Francisco». Todas sus referencias quedan al descubierto desde sus primeros acordes, en ese cuelgue romántico entre Roy Orbison, Elvis Presley y Johnny Cash. Además de sus alegatos de lo rockabilly, del pop rock a la americana que transita con la misma elegancia con la que viste trajes de tachuelas y hombreras, es capaz de hacerte lamer el terciopelo de sus baladas.

Puede que Chris Isaak no haya existido cuando nació el rock ‘n’ roll de Memphis, pero es uno de sus mejores embajadores. Con 12 álbumes en una carrera de casi cuatro décadas, Isaak llevó su sonido de Tennessee con él en cada paso del camino. Encontró un gran éxito con sus propias canciones, «Wicked Game», «Somebody’s Crying» y «Baby Did a Bad Bad Thing», entre ellas, que suenan modernas y clásicas al mismo tiempo.

«San Francisco Days» el cuarto álbum de Chris Isaak, lanzado un 13 de abril de 1993, tras el oscuro «Heart Shaped World«, fue el último de su guitarrista principal, el gran James Calvin Wilsey (bajista punkarra de The Avengers), quien había sido miembro de su banda desde su formación, debido a conflictos personales y problemas con las drogas. Wilsey tocó en un puñado de temas del disco, en el que el gran Danny Gatton tomó las riendas del mismo, Jeff Watson y el grande Tom Brumley de los Buckaroos de Buck Owens al pedal steel.

Ni Elvis, ni Roy Orbison con sus Ray-Ban oscurecidos y su inquietante falsete, ni siquiera James Dean o Chet Baker, han creado ese estilo trágicamente cojonudo de los años 50 mejor que Chis Isaak. Y en esa mezcla, Chris infunde un fatalismo sexual condenado, con canciones empapadas en una reverberación fantasmal, canciones que existen más como la banda sonora de un cine negro en blanco y negro, con canciones que crean una imagen y un formato que le permite a Chris Isaak ser Chris Isaak

Hasta este punto, Chris ha mezclado elementos lo-fi de rock n’ roll con rockabilly, creando canciones que hierven a fuego lento. El álbum parece ligeramente convencional, pero esa es solo la forma en que Chris te atrae, entrelazando sus letras con guitarras brillantes, encerrado en una batería dramática y apretada, junto con una interacción de estilos, sonidos antiguos y nuevos, lo que lo convierte en unos 41 minutos maravillosos.  «Two Hearts», «Waiting», «5:15», «Beautiful Homes», su versión descomunal del «Solitary Man» de Neil Diamond, el «I Want your Love» con el incendiario Hammond del gran Jimmy Pugh, la placentera «Except the New Girl».

En aquel 1993, aparte de todo el grunge, el pop malo y el country sombrero malo de principios de los 90, este hombre se mantuvo firme con su exotismo romántico que retrotrae a una era olvidada hace mucho tiempo y todavía se mantiene como casi nada de la época. Grande, grande siempre Chris Isaak.

Atrás quedan su legendario concierto en el Azkena Rock Festival del 2010 en Vitoria donde ni aquella gran tormenta de agua y viento logró pararlo o de también aplastante concierto en el 2017 también en el Azkena o de un concierto a cara de perro junto a Harry Connick Jr. en San Francisco hace unos cuantos años.

Si quieres redimirte, Chris Isaak visitará nuestro país el 22 de junio en Madrid en Noches del Botánico, el 24 de junio en Bilbao en el BBK Bilbao Music Legends Festival y el 12 de julio en Barcelona en el Jardin Pedralbes. A Solitary Man, seré lo que soy. 

NO MUSIC. NO LIFE. PLAY IT LOUD, MUTHA! FUCK YOUR SPEAKERS. MAKE ART NOT FRIENDS. MUSIC IS MEDICINE

Discos olvidados en nuestra sección Discos olvidados.

Chris Isaake gira España Tour Spain 2023

More from Carlos Pérez Báez

Walter Trout rinde tributo al Blues oscuro en «Survivor Blues»

Walter Trout publicó el pasado mes de enero. "Survivor Blues", 12 canciones viejas...
Leer Más