Brian Dunne y la leyenda de los perdedores

Brian Dunne edita su cuarto larga duración, «Loser On The Ropes». Un disco que explora la derrota, la negación, la fortuna, la vergüenza y la redención. Todo ello en el contexto de un mundo gobernado por fanfarrones y mentirosos que se las arreglan para salir victoriosos y sin consecuencias de sus actos. El disco supone su debut en el sello Kill Rock Stars. Grabado en Athens con el productor Drew Vandenberg (Faye Webster, Of ​​Montreal), Brian lo toca casi todo: guitarra, voz, bajo, piano y sintetizadores. Como músicos colaboradores Annie Leeth (Violín), Jojo Glidewell (Piano), Jeremy Wheatley (Batería) y Lizzie No (Coros en «Optimist»).

Escucha «Loser On The Ropes» de Brian Dunne aquí:

«Estoy obsesionado con el fracaso. Para mí es mucho más interesante que el éxito, mucho más honesto y humano»

A decir verdad, todos nos sentimos fracasados ​​en algún nivel. Somos fraudes, personas asustadas que esperan ser descubiertos. De todo esto viene a hablar Dunne en este «Loser On The Ropes». Un disco que le emparenta con ese intangible sonido neoyorkino tan característico que nadie sabe cómo, pero surge de los artistas afincados en la gran manzana. Un trabajo con bases en el punk pero lleno de melodías. Nuestro querido Jesse Malin puede ser una referencia perfecta para su sonido. Canciones sencillas y valientes, sin pelos en la lengua. Directas al grano, metiendo el dedo en la llaga de nuestros fracasos, con poética hermosa pero dura. Drew Vandenberg, el productor, hace un trabajo estupendo al saber encontrar lo mejor de cada canción y llenarlas de matices que se descubren en cada escucha.  

«Loser On The Ropes» emerge como algo mucho más estimulante que la celebración del fracaso. Es una celebración del deprimido, del luchador borracho que hay en cada uno de nosotros. Ése que regresa al ring con la nariz ensangrentada y una sonrisa torcida, hambriento de otra ronda porque sabe que siempre es mejor luchar que tirar la toalla. 

“El mundo es una mierda ahora mismo y no podremos arreglarlo si no hablamos de ello. De eso trata este álbum, tanto a nivel personal como a una escala mucho más amplia”.

Nacido y criado en Monroe, Dunne se mudó a Nueva York hace aproximadamente una década. Al principio, apenas podía sobrevivir con su música. Lejos de dejarse vencer por las dificultades, fue espabilando y endureciendo la la piel . En los años siguientes se hizo con un nombre en la ciudad. Editó un trío de álbumes muy respetados, abrió para todo tipo de artistas, desde Cat Power hasta Caroline Rose y se ganó elogios de publicaciones como Rolling Stone. En 2021, Dunne consiguió un éxito inesperado en Holanda con “New Tattoo”, un single que alcanzó el número 2 en Spotify Viral Netherlands y lo llevó al éxito en el país de los tulipanes y casi a establecerse allí.

Mientras tanto, de vuelta en Estados Unidos, Dunne grabó «The Very Best of Fantastic Cat» junto a otros tres talentosos compañeros, Anthony D’Amato, Don Dilego y Mike Montali (Hollis Brown). También consiguió firmar con Kill Rock Stars gracias a sus demos para «Loser On The Ropes», una selección de más de 200 canciones escritas en los últimos años. Trabajando con Vandenberg en Athens, desarrolló las pistas con sintetizadores analógicos y guitarras llenas de reverberación, siguiendo el sonido de Jonathan Richman o el Springsteen de «Tunnel Of Love». El equipo buscaba un ambiente cinematográfico que ayudara a difuminar los límites entre fantasía y realidad de los personajes que pueblan el disco.

Está la chica alegre sacudida por un despertar revolucionario en “Stand Clear Of The Closing Doors”. El soñador que casi se ahoga en su propio monólogo interior en “Thinking Of A Place”. El filósofo del taburete de bar que busca lo que significa todo en “Sometime After This”. Hay una parte de Dunne en cada uno de ellos, por supuesto; pero quizás ningún narrador encarna mejor a su autor que el romántico empedernido que encuentra el cielo en las pequeñas cosas de «Something To Live For»

Y esa es la belleza de «Loser On The Ropes». El trabajo de un artista que ve el mundo tal como es y aún así se niega a rendirse. El tipo que cree en el poder de una canción para ayudar a alguien a recoger los pedazos rotos de su vida y sentirse completo nuevamente. Esta obra es la de un optimista obsesionado con el fracaso. Y no hay nada más honesto ni más humano que eso.

Tras la escucha de este disco, recomendamos rescatar su anterior «Selling Things». Un trabajo maravilloso que pasó desapercibido hace dos años. Y Brian Dunne se convertirá en uno de tus artistas favoritos en los próximos años. Palabra de Dirtyrocker…


briandunne01

 

 

 

 

Escrito por
More from Javier Casamor

Existen discos igual de buenos que «Green Thoughts» de The Smithereens pero no mejores…

El debut multinacional de la banda de Pat DiNizio The Smithereens estaba...
Leer Más