The Black Halos continuarán celebrando su aniversario interpretando íntegramente su álbum más emblemático «The Violent Years» lanzado en 2001 y todos sus himnos de punk-glam en nuestras salas en octubre tras hacerlo recientemente en el Azkena Rock Festival.
Los de Vancouver The Black Halos poseídos por lo más crudo del rock & roll que atufan a hard rock-punk-garage con esa actitud de mala lecha a lo New York Dolls, Misfits, Stooges, Sex Pistols, Dead Boys y Hanoi Rocks regresan a España en octubre para mostrar el verdadero espíritu del rock and roll más salvaje y lascivo por parte de esta banda canadiense maltratada por la prensa especializada, no así por sus fans desde que publicaran su primer disco a finales de los 90.
Tocarán los Halos su segundo disco «The Violent Years» lanzado en 2001 suena un poco más punk y un poco menos rock que los álbumes posteriores. Aún tiene ese toque de rudeza en cuanto a producción, pero las canciones son lo suficientemente buenas como para valerse por sí solas. Si bien nada en este álbum realmente se destaca por sí solo, el álbum en su totalidad es bastante bueno y merece una escucha completa en cualquiera de las 9 salas donde tocarán en octubre.
Bandas y nombres como L7, Murder City Devils o Nikki Sudden mostraron siempre sus respetos, hasta tal punto de llevárselo con ellos de gira, revistas como Playboy, Flipside, Kerrang!, Metal Hammer o Hit List, también declarando su primer disco, The Black Halos, como uno de los mejores de la década del Punk Rock.
Nuestro querido Jesús María Martínez escribía sobre ellos hace unos años: El segundo disco de los Black Halos, «The Violent Years«, se editó a principios del 2001. Algunas críticas de la época ponían el álbum por las nubes y yo me lancé en su búsqueda por las tiendas, pero no conseguía encontrarlo por ninguna parte. Una banda de punk rock de Vancouver con reminiscencias de los Dead Boys, los Dolls, The Stooges, The Cramps o Hanoi Rocks y que grababa para el sello Sub Pop. En las vacaciones de Semana Santa de aquel año yo cruzaba el Atlántico por primera vez para visitar Nueva York, y la misma tarde que puse los pies en la ciudad me hice con él en la tienda HMV de la Quinta Avenida, junto al «Risin´ Outlaw» de Hank III y el «Live From The Fall» de Blues Traveler. El coreano que educadamente me atendió allí no fue capaz de darme una respuesta satisfactoria a mis urgentes demandas solicitando también el primer disco de los de Billy Hopeless, así que los paseos turísticos por la city se complementaron con la búsqueda del cd de marras.
La mañana del día 15 de abril nos levantamos con la triste noticia de que Joey Ramone había fallecido en el hospital en el que llevaba tiempo ingresado, así que nos dirigimos al mítico club CBGB para mostrar nuestros respetos y ver los regalos que los fans dejaban en el exterior en su memoria. Aquella fue una mañana muy emocionante. Visitamos un bar de emigrantes rusos en el barrio, que existía desde la primera guerra mundial, y el tipo tras la barra nos contó historias increíbles relacionadas con aquello. No muy lejos había una tienda de discos de segunda mano que por fuera parecía el pawn shop donde Maynard y Zed sodomizan a Marsellus Wallace en «Pulp Fiction«, pero que por dentro era el cielo en la tierra para un fan irredento del vinilo como yo. El sótano de aquel sitio era la puta hostia… vídeos VHS de John Cougar, camisetas vintage de Joan Jett, LP´s atómicos de Helix a precios irrisorios… y sí, allí perdido entre toneladas de discos estaba el primer cd de los Black Halos. El tipo alucinaba cuando le dije de dónde venía, y le felicité por el negocio que regentaba. Por un precio ridículo salí de allí más feliz que una perdiz, así que mis recuerdos de los Black Halos siempre irán ligados a esa ciudad, a la memoria de Joey o a aquel americano simpático obsesionado con Grateful Dead.
Esos dos álbumes rescataban la peligrosidad y la mala leche del verdadero punk rock. Una banda con un look peligroso y unas canciones detrás que salían a buscar sangre. Tras ese segundo disco, Rich Jones abandonó la banda para unirse a los penosos Amen de Casey Chaos, tal vez pensando que ahí estaría más cerca de un éxito que los Halos parecía no iban a alcanzar jamás. El germen compositivo del grupo se había perdido, y tras dos álbumes más la cosa se acabó. Matt Camirand también se fue por entonces y acabaría formando parte de Black Mountain, mientras que Jay Millette y Rob Zgaljic aguantaron algo más. Rich está ahora con Michael Monroe a tiempo completo, y tras una primera intentona de reunión original en un festival Serie Z que no llegó a fructificar, vocalista y guitarrista han conseguido dar una segunda vida al grupo en esta intensa gira «Black From The Grave!» por España. Sé que han ofrecido a otros miembros originales la posibilidad de venir, pero al final les han acompañado Star Mafia Boy a la segunda guitarra, Sue Gere (Rockzilla, Warrior Soul) al bajo y Johnny Biscuit (Nancy Hole) a la batería. Y no seré yo quien se queje, el show de la otra noche fue memorable y esos tres tipos demostraron que merecían estar ahí, con un carisma escénico al nivel de Billy y Rich tanto instrumentalmente como en actitud.
Fechas de la gira de The Black Halos 2024:
- 18 octubre en Madrid, Sala Clamores
- 19 octubre en Jerez, La Guarida del Ángel
- 20 octubre en Estepona, Louie Louie
- 22 octubre en Orihuela, La Gramola
- 23 octubre en Barcelona, Razzmatazz 3
- 24 octubre en Zaragoza, Rock & Blues Café
- 25 octubre en Vitoria, Helldorado
- 26 octubre en León, Babylon
- 27 octubre en la Coruña, Mardi Gras
Fotos Koldo Orue.
